En las relaciones de pareja es muy importante tener regulación emocional muchos no saben qué es eso, ni porque es importante saber del tema, pero hay que tomar conciencia de que en una relación emocionalmente inteligente, debe existir una concordancia, de los valores desde la comprensión de las emociones propias y de la pareja: “yo te comprendo y te respeto”, “sé lo que sientes, sé lo que necesitas”, en terapia de pareja se trabaja mucho regulación emocional, aquí te daré una breve explicación de que es la inteligencia emocional.
En el plano de las relaciones interpersonales, la inteligencia emocional nos hará adoptar una actitud más empática y abierta que facilita el diálogo. Además, nos permitirá abordar los conflictos de forma más asertiva, sin tener estallidos de ira y respetando los derechos de la pareja. Todo esto hará que la pareja se sienta a gusto a nuestro lado.
Sin embargo, la inteligencia emocional no es una suma de cualidades, no es sinónimo de amabilidad y optimismo, ni tampoco es un estado como la calma o la felicidad. El concepto de Inteligencia Emocional hace referencia a una serie de competencias que se pueden desarrollar a lo largo de la vida y de la relación de pareja.
La inteligencia emocional también es comprenderla, tener en cuenta sus sentimientos y motivaciones y asumir diferentes roles según lo demande el contexto. Una persona con Inteligencia Emocional será capaz de conectar con la pareja, considerar sus necesidades y aliviar las tensiones para propiciar una experiencia enriquecedora para los dos.
Las emociones son una señal de alarma que nos indica cómo nos encontramos y qué puede estar funcionando mal, pero lo cierto es que muchas personas no son capaces de reconocer sus emociones, son conscientes de se sienten mal pero no logran discernir la emoción que se encuentra en la base.
Sin embargo, la ira es muy diferente de la tristeza y de la frustración por lo que es importante aprender a distinguir lo que sentimos. No se trata de una mera etiqueta verbal, al darle un nombre a la emoción que experimentamos sentamos las bases para comprendernos mejor y poder controlar nuestras reacciones.
La inteligencia emocional no se limita a identificar y comprender nuestras emociones, es necesario que aprendamos a expresarlas de una manera asertiva, en el respeto al otro.
La empatía va mucho más allá de comprender racionalmente a la otra persona, es ponerse en su lugar y sentir lo que siente, implica conectar emocionalmente estableciendo un vínculo muy íntimo que nos permite comprender sus comportamientos, aunque no estemos de acuerdo con ellos.
Aprender a escuchar a nuestra pareja más allá de las palabras, es entender porque mi pareja piensa y siente lo que dice es ser empáticos, amables compasivos con la otra persona y con nosotros mismos.
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