Secarse el pelo frecuentemente hace que lo sometamos a una temperatura que no es favorable para su salud. Cuando queremos rehabilitarlo lo primero que debemos hacer es evitar el calor de las pinzas, las planchas y los secadores de pelo. Esto lo debemos cambiar por cremas para peinar, tratamientos de pelo y aceites que ayuden a nutrirlo. A veces es necesario secarlo para quedar perfectas, pero entonces debemos sacar el máximo provecho a este tiempo de calor y hacer que nos rinda mucho tiempo el peinado perfecto.

Comencemos hablando de la forma ideal para secarlo. Antes de exponer el pelo al calor debemos contar con un termoprotector. Este puede venir en crema o spray ligero. Lo que hace el termoprotector es ayudar a proteger el pelo del calor. Al utilizarlo podemos notar que el cabello queda mucho más suave. Actúa como una barrera que sella la humedad y previene el frizz, además de suavizarlo. Es ideal utilizarlo cuando se va a exponer el pelo al secador, la plancha o las pinzas.

Lo ideal es que una vez apliques el termoprotector ya puedas seguir con el paso del secado. Antes de encender el secador fíjate bien que tu pelo esté lo más seco posible con la toalla. Aquí debes tener en cuenta que no importa el secador que estés utilizando, debes mantenerlo a una distancia de 20 centímetros entre la boquilla del secador y tu pelo o cepillo. De esta manera evitarás quemar el pelo.

Divide el pelo para lograr un secado ordenado. Al hacerlo podrás evitar que se te quede algún mechón por fuera sin peinar. Lo ideal no es llenar el pelo de ganchos, puedes dividir la cabeza en cuatro partes y listo.

Pasar el secador por la raíz puede ser el rotundo éxito de un secado duradero. Cuando la raíz queda bien seca y peinada esto te garantiza más tiempo de “perfección” en el peinado. Muchas veces nos centramos en la raíz pero, olvidamos que las puntas son importantes para hacer ver el pelo saludable y con forma. Después de secar muy bien la raíz y el cuerpo del pelo pasa a secar las puntas con un cepillo que le dé forma. Lo ideal es que no queden flechadas para que mantengan movimiento y naturalidad, así se verán mucho más saludables.

Al secar el pelo debes tener un buen cepillo. No todos son iguales y le funcionan de la misma manera a todas las personas. Hay quienes aseguran que los cepillos con cerdas de jabalí son los que más brillo le proporcionan al pelo, estas cerdas ayudan a extraer los aceites naturales de tu cuero cabelludo, haciendo que disminuyas la cantidad de producto antirizos que utilizas. Aunque los cepillos de cerdas de jabalí son costosos, son muy duraderos y tienen buena vejez.

Para un secado mucho más rápido y antifrizz está el cepillo de cerámica. Este es el más usado, en el centro tiene un cuerpo hueco de cerámica que ayuda a que fluya el calor del secador y al peinar logres controlar el frizz.

Cuando sientes que el secador no está funcionando de la misma manera que de costumbre revisa para ver si está sucio. Los secadores hay que limpiarlos frecuentemente en la parte de atrás, en la que acumulan una capa de sucio que ayuda a que el motor no ventile con facilidad. Si no está limpio podemos dañar el secador. Muchas veces notamos que el botón de frío del secador nunca lo utilizamos. Ese botón tiene una razón de ser muy importante y es que al final después de terminar de secarnos el pelo debemos poner un poco de aire frío para fijar el peinado. Esto ayudará a que el secado demore mucho más tiempo. Finaliza tu secado con un aceite que le dé brillo al pelo, pero ojo, debes aplicarlo desde la mitad hasta las puntas, no en la raíz, de esta forma evitarás que se engrase.