Compartir:

Desde el 7 de diciembre las luces de un hogar en Barrio Abajo se encendieron para dar vida a una celebración y tradición que para ellos no puede pasar desapercibida en el último mes de cada año.

Y es que el pesebre es visto allí como un pequeño milagro, que siempre tiene una merecida inauguración. Este espacio que busca reunir a las familias y a los niños podría decirse que es diferente a muchos de la Arenosa, porque se recrea una Belén caribeña hecha de fe.

Lea aquí: Usiacurí vuelve a vivir la magia de la Navidad con su Pesebre en Vivo

Entre casitas de cartón envejecidas a mano, palmeras de papel y una cascada que cobra vida gracias al agua en movimiento, la ciudad sagrada se siente con ambiente barranquillero. En cada rincón de este pesebre se siente el trabajo familiar, mientras que el brillo de las luces no solo ilumina el lugar, sino también la vista de quien observa la obra de arte. Allí, en medio del barrio, Belén es un encuentro con la Navidad.

Orlando AmadorEl ‘Pesebre Ciudad’ ubicado en Barrio Abajo es liderado por Ángel Pedraza, familiares y vecinos.

El ‘Pesebre Ciudad’ de la familia Pedraza, año tras año, ha ido creciendo en detalle, creatividad y significado para los vecinos y visitantes. Y nació, según contó a EL HERALDO su artífice, José Ángel Pedraza, desde hace nueve años como respuesta a una promesa personal. “La idea la tenía hace mucho tiempo, pero hace nueve años tomé la decisión, fue como un llamado y como promesa de Dios, yo dije: –Vamos a hacer un pesebre, y lo voy a construir, no lo voy a dejar de hacer hasta que Dios quiera–”, relató Pedraza con emoción y amor hacia su obra de arte.

Una obra en progreso

Desde esos primeros días, cuando el proyecto apenas alcanzaba un metro de altura y estaba armado con pocos materiales, hasta hoy, la evolución ha sido notable. Lo que comenzó como un pequeño montaje en la terraza de su casa, con materiales modestos como un tapete de grama artificial y seis casitas hechas con cartón, pronto se transformó en una obra colectiva.

“Inicialmente fue un pesebre pequeñito, lo construí con unas cuantas casas, la fuente fue con un plástico, fue un pesebre muy básico y el tapete recuerdo que me lo regaló mi cuñado”.

La creatividad, en gran parte impulsada por Pedraza, su familia y su círculo cercano, ha sido clave para que el pesebre supere cada año el anterior. El trabajo es en conjunto, José realiza un dibujo, y unos de los datos a resaltar de esta obra de arte son los materiales con los que lo realizan.

La sostenibilidad es un valor fundamental en la construcción del pesebre, pues las estructuras están hechas principalmente de cartón, papel y cemento, rescatando estibas que a veces encuentran en la calle o que son donadas por vecinos.

Orlando AmadorEl ‘Pesebre Ciudad’ ubicado en Barrio Abajo es liderado por Ángel Pedraza, familiares y vecinos.

La fuente, uno de los elementos más fotografiados por quienes visitan el nacimiento, funciona gracias a una bomba, símbolo de movimiento y esperanza en medio de la escena.

“Mi papá empieza a armar las casas con cartón, mis sobrinas y yo las empezamos a machucar, luego yo hago el acabado con pintura y envejecimiento y mi papá busca las estibas, normalmente las vemos por ahí en buen estado, todo tratamos de hacerlo reciclado. Pero estas no se pierden, porque también las utilizamos para la época de carnaval”, explicó Pedraza.

Su significado

Más allá de lo artesanal, el ‘Pesebre Ciudad’ se ha convertido en un punto de encuentro para la comunidad. Desde familias enteras hasta grupos de niños acompañados de sus padres, el espacio acogió a más de 80 pequeños este año, quienes han participado en actividades y celebraciones propias de la temporada.

Pedraza resaltó con orgullo que cada niño que llega es bienvenido. “Yo todo se lo dejo a Dios, siempre digo que los niños que él me quiera enviar serán bien recibidos”.

Orlando AmadorEl ‘Pesebre Ciudad’ ubicado en Barrio Abajo es liderado por Ángel Pedraza, familiares y vecinos.

La familia Pedraza, junto con vecinos, también organiza novenas y eventos culturales en torno al nacimiento del Niño Jesús. Barrio Abajo, conocido por ser uno de los sectores más tradicionales de Barranquilla y cuna de expresiones culturales propias de la ciudad, ha visto cómo esta iniciativa se integra con la vida cotidiana del barrio, animando a muchos a decorar sus casas, patios y calles con motivos navideños que contagian alegría y sentido de pertenencia.

Le puede interesar: Miss Jamaica 2025 reaparece tras grave accidente en pasarela de Miss Universo

La historia del ‘Pesebre Ciudad’ también está marcada por la colaboración. El artista habló de “ángeles”, como llama a quienes donan regalos para los niños.

“Siempre he dicho que esos son ángeles que Dios nos manda, porque por aquí pasan carros y pasa la gente a la que le llama la atención el pesebre y se ofrecen a realizar donaciones para todos esos niños”, comentó.