Antes que nada, no vengo hablarles de fútbol, pues creo que sería un insulto para los verdaderos expertos deportivos, que tantos análisis exhaustivos han hecho sobre este deporte y sus sorpresas, que yo venga a opinar sobre lo que no sé. Así que tranquilos, no voy a escribir sobre si considero que el traslado de Messi al PSG fue un acierto o todo lo contrario, ni opinaré desde un ángulo futbolístico sobre la decisión sorpresiva de Ronaldo de volver a su casa inglesa, el Manchester United. La verdad, nada de eso me compete.

Sin embargo, de lo que sí hablaré y sobre lo que sí siento que tengo alguna especie de autoridad para debatir, es sobre lo que sucedió en el mundo con ambas noticias, y lo impresionante que es lo que estamos viendo suceder ante nuestros ojos.

La dolorosa salida de Lionel Messi del Fútbol Club Barcelona lo paralizó todo como pocas noticias lo han logrado hacer. De repente, en ninguna parte se hablaba de otra cosa, en todos los titulares de todos los periódicos, revistas deportivas, portales de noticias, noticieros televisivos y cadenas radiales, se hablaba de él. Entrabas a cualquier red social, y la imagen de Messi llorando era compartida en todas partes, y como por arte de magia, todo el mundo se convirtió en un analista empírico que alzaba la voz para dar su punto de vista.

La cuenta de Instagram del París Saint-Germain creció seis millones seiscientos mil seguidores en una semana, y como consecuencia, ‘La Ligue 1’ se fortaleció como nunca antes. El poder de Messi es tan grande que hay que decir las cosas como son: comercialmente ‘La Liga’ de España ha perdido su valor, y todo ese fanatismo que se había construido durante décadas, se ha visto fuertemente disminuido. Es impresionante que una persona haya logrado que el interés se haya perdido de esta manera. Y en un mundo como este dónde el dinero está en la relevancia, la cosa no se ve fácil para los equipos españoles.

Pero el tema no acabó ahí, Cristiano Ronaldo más que un extraordinario jugador, es un maestro de las estrategias de marketing. Lo que sucedió con su fichaje del Manchester United, fue una jugada asombrosa de comunicación y de mercadeo. Ronaldo sabía que no podía quedarse por fuera de la conversación, y como siempre, supo cómo volver a ser el centro de atención. Volver a ‘su casa’, al lugar que lo vió convertirse en grande, y hacerlo con el misterio con el que lo hizo, es la razón por la que yo, que poco sé de fútbol, lo considero un ‘crack’.

La verdad es que queda demostrado que, así sea con intención o sin ella (pues Messi ha dejado claro que maneja un bajo perfil), el fútbol y sus protagonistas son mucho más que un deporte y unos deportistas, y nos guste o no, son quizás los actores que más lideran la conversación mundial.

Porque nada une y divide como el fútbol...y porque nada genera ‘más tráfico’ que ser de Messi o de Cristiano.