El pasado 29 de enero el comandante del Gaula de Bolívar le escribió una carta a Marjorie Cervantes, directora de la seccional Atlántico del Instituto de Medicina Legal, con el propósito de solicitar el radicado de la comunicación con la que se remitieron unas muestras para cotejo genético al laboratorio de Bogotá. “Lo anterior con el fin de realizar las gestiones pertinentes del caso que nos ocupa para los resultados de las muestras genéticas de los informes periciales de necropsia (…), toda vez que nos encontramos en un caso de connotación nacional y las indagaciones que se han realizado en la ciudad de Bogotá con base a los resultados indican que no tienen conocimiento al respecto de dichas muestras” dice el oficial.

Las muestras a las que se refiere el comandante del Gaula son de los hermanos Dario y Wilmar Rivera, dos pequeños ganaderos de Montes de María que fueron sacados de su finca por encapuchados armados el 14 de marzo de 2019. En aquel momento el entonces gobernador de Bolívar, Dumek Turbay, se desplazó a San Cayetano -lugar de los acontecimientos- y ofreció una recompensa de 100 millones de pesos. Lamentablemente los hermanos Rivera fueron encontrados sin vida en una fosa, aún con las capuchas puestas. A través de interceptación de llamadas, allanamientos y una exhaustiva investigación, se logró establecer la identidad de los responsables.

Hicieron las respectivas capturas y se hizo su debida imputación. Cuatro personas tienen medida de aseguramiento en establecimiento carcelario y dos tienen medida domiciliaria. De manera diligente la Fiscalía presentó su escrito de acusación en Septiembre y la audiencia de acusación estaba programada para el 27 de noviembre. En aquel momento no se pudo realizar porque no se presentó uno de los abogados de los capturados. Se estableció entonces que la audiencia se realizaría el próximo 20 de febrero.

La carta del Comandante del Gaula revela preocupación porque dentro de unos días será la diligencia y sin los resultados de Medicina Legal será difícil demostrar que los muertos hallados en la fosa son los señores Rivera. Pese a las confesiones de los delincuentes, existiría el riesgo de que sean condenados únicamente por secuestro -con una pena menor- porque simplemente los cuerpos no han sido identificados.

Medicina Legal lleva 9 meses haciendo el cotejo genético de las víctimas. Por las razones que sea, esa velocidad no le sirve a la justicia. No podemos desconocer la enorme carga de trabajo que debe reposar en esta entidad en un país tan violento, un país en guerra, la extensa fosa común que somos, pero algún tipo de priorización o de actuación extraordinaria se debe adelantar en casos en los que se requiere la información para una audiencia tan determinante. Estamos a punto de ser testigos de cómo dos homicidios quedan en la impunidad por los tiempos que se toma Medicina Legal en hacer la identificación genética de los cuerpos. El calendario sigue corriendo y todos en la región estamos muy atentos cómo se desarrollan el proceso judicial.

@ayolaclaudia

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