El problema comúnmente asociado al corazón es el infarto, sin embargo existe una enfermedad que es más silenciosa, crónica y degenerativa: la insuficiencia cardíaca.
En esta enfermedad el corazón es incapaz de bombear sangre de manera eficiente para atender las necesidades del cuerpo, por lo cual la sangre no puede llevar el oxígeno ni los nutrientes necesarios a diferentes partes del cuerpo.
Érika Martínez, especialista en Medicina Interna, Cardiología Clínica y máster en Falla Cardíaca, explica que la insuficiencia cardíaca puede afectar a todo tipo de persona, 'pero especialmente a quienes tienen enfermedades coronarias, infarto agudo de miocardio, diabetes e hipertensión arterial'.
Dentro de los factores de riesgo, indica, están la obesidad, falta de ejercicio y el tabaquismo.
De acuerdo con un informe elaborado por la consultora Deloitte, en el país cerca de 650.000 personas viven con esta condición, y sin el acompañamiento médico o el tratamiento adecuado se calcula que uno de cada dos pacientes morirá en los cinco años siguientes al diagnóstico.
Tratamientos
Martínez explica que de los tratamientos hay dos tipos: el farmacológico y el no farmacológico, todo en el marco de una enfermedad evitable.
'El primero se trata de modificar los estilos de vida del paciente con ejercicio, comida sana, control de líquidos, azúcares, grasas y sales, no fumar o tomar alcohol. Tener hábitos de vida saludables, además de la rehabilitación cardiaca, que es una serie de ejercicios programados por un especialista que buscan mejorar la función del corazón'.
La edad de presentación puede ser cualquiera, sin embargo la estadística muestra que es en pacientes mayores de 40 años, 'pero nosotros tenemos pacientes pediátricos que pueden sufrir de fallas cardíacas, chicos desde los 18 años. El grueso de pacientes está entre los 45 y 50 años, entre más edad aumenta la frecuencia', apunta la especialista.
Esta enfermedad, que afecta a más de 60 millones de personas en el mundo, es crónica, pero se puede sobrellevar y mejorar la calidad de vida.
'Lo importante es mejorar la calidad de vida y hacerlo adaptable a la sociedad, que lleve una vida normal. Son pocos los casos reversibles, pero pueden mejorar su función', sostiene la doctora.
Para Martínez es importante tener en cuenta que 'tiene una alta incidencia en la parte de mortalidad' y que una de cada tres personas confunde los síntomas con los signos propios del envejecimiento.
'Es importante que acudan al médico cuando hay hinchazón de los pies, deterioro, fatiga. Es una enfermedad que tiene manejo y se puede mejorar muchísimo', finaliza.
Síntomas
• Dificultad para respirar.
• Fatiga.
• Cansancio extremo.
• Hinchazón en tobillos, piernas y abdomen.
• Aumento repentino de peso.
• Pérdida de apetito.
• Latidos cardiacos rápidos.
