Por orden de un juez federal de Estados Unidos, el expresidente peruano Alejandro Toledo, deberá entregarse a la Policía estadounidense este viernes 21 de abril, para efectuar su arresto e iniciar su respectivo proceso de extradición a Perú, en donde deberá enfrentar a la justicia por cargos de corrupción relacionados con el caso Odebrecht.
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De acuerdo con lo dispuesto este miércoles en el fallo dictaminado por el magistrado Thomas S. Hixson, del Distrito Norte de California, Toledo deberá permanecer bajo reclusión carcelaria en Norteamérica 'hasta que haya concluido su entrega a las autoridades peruanas'.
El arresto para la extradición del exmandatario, residente en San Francisco, estaba dispuesto para llevarse a cabo el pasado 7 de abril. Sin embargo, este no había podido efectuarse debido a los múltiples recursos legales interpuestos por la defensa del acusado para dilatar el proceso.
Como últimas 'maniobras dilatorias' (tal como las catalogó el ministro de Justicia del Perú, José Tello), Mara Goldman, abogada de Toledo, pidió una nueva audiencia para reconsiderar su entrega; y luego, que su detención se realizara el próximo martes 25 de abril.
No obstante, la justicia norteamericana negó en ambas ocasiones la petición de la defensa y pidió la reactivación de la orden de detención del expresidente. Por lo cual, este tendrá hasta este viernes a las 9:00 hs. (hora local de la costa oeste de Estados Unidos) para entregarse.
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En concreto, los cargos penales por los cuales Perú está requiriendo la extradición inmediata del exmandatario, son: una investigación por lavado de activos, colusión y tráfico de influencias por contratos concedidos a Odebrecht para la construcción de la Ruta Interoceánica entre Brasil y el país de Toledo.
En este territorio, el caso Odebrecht, está considerado como el mayor escándalo de corrupción (así como en el resto de Latinoamérica) y, además de Toledo, salpicó a los expresidentes peruanos Alan García (1985-1990 y 2006-2011), Ollanta Humala (2011-2016) y Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018), así como a la tres veces candidata presidencial Keiko Fujimori, hija y heredera política del exmandatario Alberto Fujimori (1990-2000).
