El ministro de Ambiente, Luis Gilberto Murillo Urrutia, debió ingresar a urgencias del hospital Nuestra Señora de los Remedios, en Riohacha, aquejado por trastornos sufridos en lo que fue calificado por el alcalde de Fonseca, Misael Velásquez Granadillo, como una jornada extenuante que iniciaron a las 10 de la mañana y terminaron a las 5:30 de la tarde.
Al ser interrogado en una de las salas asistenciales, el ministro sostuvo que se había descompensado y que le dieron unos medicamentos para fortalecerlo, y llevarlo a condiciones de normalidad.
El ingeniero de minas, que ocupa la cartera ambiental, dijo que no cree que fueran producto del alimento que ingirieron en la jornada laboral. 'Hemos estado trabajando fuertemente y es probable que sea fruto del esfuerzo para hacer las cosas bien', aseguró.
Alcalde de Distracción
En la clínica Cedes de Riohacha, casi simultáneamente, llegó el alcalde del municipio Distracción en el sur de La Guajira, Pedro Javier Guerra Chinchilla.
Según testigo, apenas bajó de una camioneta de color gris, no pudo llegar a la entrada de la urgencia, sino que corrió a uno de los extremos de la edificación donde fue atacado por náuseas. 'Vomitó en varias ocasiones, fueron más de cinco minutos que estuvo en ese estado', dijo una mujer que vende golosinas en una chaza frente a la clínica.
El alcalde ingresó a la clínica, fue atendido por el personal médico, pero no demoró mucho tiempo en la sala de urgencias del centro asistencial.
