Uno de los procesos por los que se encuentra en la cárcel Levith Rúa Rodríguez, presunto violador en serie, se encuentra ya en la etapa preparatoria de cara al juicio oral.
Se trata del denuncio que presentó una joven de 17 años abusada en Soledad. En este, el hombre conocido como la Bestia del Matadero fue formalmente acusado por la Fiscalía.
Ante el juez Primero Penal del Circuito con funciones mixtas de Soledad, la fiscal 51 seccional, Dayana Milagro Vizcaíno, presentó el escrito de acusación en contra del expolicía por los delitos de secuestro simple, hurto calificado y agravado, y acceso carnal violento agravado.
La Bestia del Matadero fue remitido por el Inpec desde la cárcel Tramacúa de Valledupar y estuvo presente en la audiencia que se llevó a cabo en el Palacio de Justicia de Soledad. Durante la duración de la diligencia, Levith Rúa sacó un papel de su bolsillo, revisó los documentos presentados por la Fiscalía y tomó nota de todo lo dicho por la representante del ente acusador.
La fiscal Vizcaíno presentó 14 testigos en la diligencia de cara al juicio oral. Entre estos hay ocho investigadores quienes hicieron los estudios respectivos al lugar de los hechos, como a la víctima tanto física como psicológicamente.
La víctima y miembros de su núcleo familiar también integran el grupo de llamados a testificar por la fiscal. El médico particular que atendió a la víctima en el Hospital Nazareth, a donde llegó tras haber sufrido la agresión sexual, será el último en testificar.
Los hechos de los que es señalado Rúa sucedieron a las 9 de la mañana del pasado 13 de diciembre, cuando la joven de 17 años se encontraba a las afueras de la peluquería de su tía, ubicada frente al estadio Metropolitano.
Según la víctima, Levith Rúa 'le preguntó si trabajaba en la peluquería y posteriormente le exhibió un arma de fuego, manifestándole que si gritaba la mataba'.
Luego, Rúa la habría tomado del brazo, y forzándola la llevó hasta donde estaba su carro parqueado a pocas cuadras de donde habría sido privada de su libertad a la fuerza. Una vez dentro del vehículo color negro, la Bestia del Matadero presuntamente le mostró a su víctima un carné de la Policía y un radio que cargaba.
Condujo a la adolescente hasta una zona enmontada conocida como trocha Villa Heidy, que queda en la prolongación de la calle Murillo entre Malambo y Soledad, cerca de un matadero.
Dentro de una finca, en un cambuche, la tuvo privada de su libertad durante cinco horas en las que, según manifestó la víctima a las autoridades, abusó sexualmente en tres ocasiones de ella, bajo la constante amenaza del arma de fuego y de un cuchillo.