El Día de la Madre, uno de los festejos del año con altos índices de violencia, según datos estadísticos de la Policía Nacional, será vigilado en la capital del Atlántico y sus cuatro municipios del área metropolitana por 4.000 uniformados, de acuerdo con lo manifestado por el coronel Jesús De los Reyes, comandante operativo (e) de la institución.
La institución armada tiene actualmente en la ciudad y su área metropolitana 4.847 uniformados, lo que demuestra que estará disponible casi completo el número de miembros, entre hombres y mujeres.
En rueda de prensa realizada ayer desde el comando de la institución, De los Reyes señaló que este número de uniformados, de las distintas especialidades de la Policía, estarán presentes en zonas de alta concurrencia como establecimientos de venta de licor, bares, billares y tiendas. 'Hemos determinado que en algunos se abrirá hasta las 4:00 de la mañana, pero si vemos que existen riesgos se evaluará un cierre antes de esa hora', anotó.
Asimismo, precisó el coronel, habrá un esquema de seguridad especial en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez, por cuenta del partido Junior-Medellín, correspondiente a los cuartos de final de la Liga del Fútbol Profesional Colombiano.
'En este encuentro habrá 1.000 uniformados de las distintas especialidades. Tenemos claro que no está avalado el ingreso de las barras del equipo visitante al estadio, por lo que haremos unos operativos especiales en las vías de acceso a la ciudad', manifestó el comandante.
Este luego indicó que en cuanto a la vigilancia en zonas residenciales 'los policías del cuadrante harán los patrullajes habituales'.
El pasado viernes, el coronel Gelber Peña, comandante operativo, dijo que se harán operativos de control para no permitir los picós en espacio público.
'Es un fin de semana violento, en el que ocurren muchos casos de lesiones personales y homicidios. Por esta razón, el comando de la Mebar ha dispuesto de todas las capacidades para hacer patrullajes precisos en distintos puntos de la ciudad. Sin embargo el control se genera desde las casas', expresó el oficial.
Además estará disponible el helicóptero Bell 407 con el sistema de visión diurna e infrarroja de alta definición, luz de búsqueda y conexión con las patrullas en tierra a través de modernos equipos de comunicación.
Tales planes de vigilancia se anuncian debido a los registros negativos en la celebración del Día de la Madre en años anteriores. Incluso, en el país, la fecha ha marcado como la más violenta entre otras celebraciones masivas.
De acuerdo con la Oficina de Seguridad del Distrito, en los últimos cinco años se han registrado hasta 15 homicidios durante dicha celebración en Barranquilla.
El año anterior, para disminuir los índices, la Policía Metropolitana dispuso de 4.300 uniformados en 37 puntos de la ciudad en los que se habían registrado riñas. Sin embargo la capital del Atlántico registró, además de los tres homicidios, 11 casos de violencia intrafamiliar y 11 personas lesionadas.
En otras ciudades del país se expidieron hasta decretos para evitar la ocurrencia de hechos violentos. Por ejemplo, en Cali el alcalde, Maurice Armitage, decretó la ley seca desde las 10:00 de la mañana de ayer hasta las 6:00 de la mañana del martes.
'Esta medida tiene una profundidad social inmensa, aquí en Cali y en Colombia no podemos seguir aceptando que el Día de la Madre sea el día más violento del año', manifestó Armitage.
En Medellín, por su parte, 10.000 agentes de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá vigilarán para evitar que se registren riñas y homicidios.
Vigilancia en Soledad
El mayor Erick Coronado, comandante del Distrito 6 de la Policía Metropolitana, el cual cubre la vigilancia de Soledad y Malambo, precisó que en cuanto a las dos poblaciones pertenecientes al área metropolitana de Barranquilla 'se harán las caravanas de seguridad en zonas comerciales para inspeccionar los negocios que incumplan con requisitos normativos'.
'Hacemos un llamado a la comunidad para que se comporten en el fin de semana, la ingesta de bebidas alcohólicas aumenta el número de riñas y muertes', anotó Coronado.
