En una modesta casa del barrio Boston, en la localidad Norte-Centro Histórico de Barranquilla y que más tenía apariencia de espacio de estudiantes pensionados de universidad, funcionaba la empresa de apps móviles MagiTek Internacional SAS y su filial Merlim Network. Desde allí, según una publicación en su página web, se manejaban desde 2014 los negocios de Ecuador, Brasil, Kenia y Uganda, entre otros países.
Por este lugar, de acuerdo con vecinos del sector, pasaban continuamente jóvenes vestidos informalmente, incluso con ropa para hacer deporte. En su mayoría, cargaban morrales y llevaban puestos audífonos de diadema.
'A nosotros nos parecían estudiantes de universidad. Siempre pensamos que allí funcionaba una academia o un centro de estudios porque era continuo el paso de los jóvenes, tanto de mañana como de noche. También entraba y salían domicilios de comida', señaló un testigo que habita cerca del inmueble.
Sin embargo, el desfile de personas que se vio el viernes anterior no resultaron ser 'estudiantes', como lo pensaban vecinos, sino empleados de las plataformas virtuales, en especial, ingenieros de sistemas, diseñadores gráficos y desarrolladores de videojuegos.
Estos, supuestamente, eran los encargados de darle 'vida' al entramado virtual enfocado en el desarrollo de aplicaciones y juegos móviles que se ofrecía a través de Merlim Network y que, según clientes, terminó siendo una 'estafa mundial'.
Primer negocio
Merlim Network, de acuerdo con las investigaciones adelantadas por las autoridades locales, ofrecía tres modalidades o planes de inversión diferentes para que sus usuarios generaran dinero. Cada uno de los planes: de 330 dólares, otro por 530 dólares y uno más 930 de la moneda extranjera, daba derecho a obtener un paquete de aplicaciones, de las que se podían usar y visualizar para obtener una recompensa monetaria. Cada plan tenía de duración 180 días.
En ese sentido, el primer plan de 330 dólares dejaba ganancias solo por jugar 30 minutos en las aplicaciones de Merlim Network y visualizar sus banners. Así el cliente obtenía 4 dólares diarios, lo que significaría al final del plan una ganancia de 390 dólares.
El plan de 530 dólares, similar al primer plan, tenía como diferencia que se pagaban 6 dólares al día por los 30 minutos de juego de un cliente. Al cabo de seis meses esto se traducía en 550 dólares.
Y el plan de 930 dólares, similar a los otros dos, dejaba de ganancia 11 dólares al día por la media hora de juego. Al final de temporada la ganancia sumaría 1.050 dólares.
Traer más clientes
Otra de las formas para hacer dinero dentro de Merlim Network era por medio de afiliaciones, es decir, venta de planes. Esto, de acuerdo a las especificaciones de la firma, permitía a los que no querían o no tenían para invertir ser parte del programa.
Cada venta de un plan con los valores de 300 dólares, 500 y 900 dólares, les iba a generar un 10% del valor del plan vendido a un cliente, algo prohibido por la ley (ver nota Supersociedades) y que es propio de los esquemas piramidales, donde el mayor atractivo económico es atraer una red de clientes –que a su vez implicarán a otros– que vender un producto o servicio.
'Por 300 dólares se obtenían 30 dólares, por 500 eran 50 dólares y por 900 se ganaba la cifra de 90 dólares', explicó el viernes una de las personas que invirtió en el modelo.
Sistema Binario
Este ítem de Merlim funcionaba para la generación de puntos por cada paquete vendido a un nuevo usuario. Por ejemplo, un paquete de 330 dólares generaba 80 puntos binarios; el paquete de 530 dólares generaba 140 puntos binarios y el paquete de 930 dólares generaba 200 puntos binarios.
En ganancias esto se traducía: 80 puntos pagaba 40 dólares; 140 puntos binarios 70 dólares y los 200 puntos un valor de 100 dólares.
Bono de liderazgo
El último escalafón de ganancias de Merlim era el ‘bono de liderazgo’. Era un incentivo trimestral que la compañía daba a sus miembros de la ganancia obtenida por esta. Los incentivos estaban repartidos por categorías plata, oro, platino y diamante.
Las categorías las obtenía un cliente por el número de personas referidas por este en la empresa. Es decir, a mayor número de clientes, más era valor de la categoría y la ganancia obtenida.
Se estableció que un miembro plata recibía el 1% trimestral, lo que se podía traducir en unos 6.000 dólares; un miembro oro recibía el 1,5% trimestral, unos 12.000 dólares; el miembro platino el 2,0% trimestral, unos 24.000 dólares y el miembro diamante recibía el 2,5% trimestral, es decir 48.000 dólares, según la firma.
