En un momento de deterioro financiero del sistema de salud que pone en riesgo la operación de las EPS Sura, Sanitas y Compensar y, de paso, la prestación de servicios para sus más de 13 millones de usuarios, el nuevo reconocimiento obtenido por MiRed IPS es un espaldarazo más a su innovador modelo de atención primaria e integral.

La red pública de Barranquilla focalizada en su población más vulnerable acaba de recibir la certificación de calidad 9001:2015 del Icontec, que por primera vez la concede en Colombia a una organización que desempeña estas funciones.

Este logro, uno más que se suma a su lista de distinciones nacionales e internacionales, merece nuestra atención, porque detrás de un sistema valorado por su eficiencia en cabeza del secretario Humberto Mendoza y de su gerente, Rómulo Rodado, se encuentra el esfuerzo de su talento humano en salud.

Unos 2.500 profesionales, además de colaboradores que en su momento recibieron el aplauso unánime de la sociedad por su gestión durante la pandemia, mujeres y hombres dignos de respeto y gratitud que gracias a su trabajo han construido lazos de confianza con la gente en los más de cinco años de operación del actual modelo que se ha venido perfeccionando desde 2008 y que en la actualidad atiende a cerca de 630 mil usuarios en Barranquilla, donde se ha alcanzado ya un 99 % de cobertura de aseguramiento en salud.

La percepción de un servicio de calidad depende en buena medida de la experiencia de los usuarios. En ese sentido, cada quien tendrá sus razones para expresarse a favor o en contra del modelo. Sin embargo, la evidencia demuestra que el Distrito ha estructurado un sistema de georreferenciación para que los habitantes de la ciudad, en particular los de los sectores más vulnerables cuenten con una oferta de servicios de baja, mediana y alta complejidad a menos de 15 minutos de sus hogares. O como mucho, entre uno y tres kilómetros del sitio donde viven.

No todas las veces se logra, por lo que siempre habrá oportunidad de mejora. Pero, la apuesta de calidad de esta red integrada, sin barreras en la prestación de servicios ni intermediarios, y en ello radica la clave de su articulación pionera en el país, se orienta a garantizarles a las personas, al margen de su condición socioeconómica, nacionalidad o procedencia, acceso a atención en salud en los distintos niveles. Inicialmente, atención primaria en los 28 PASO, luego están 9 CAMINO para urgencias y procedimientos ambulatorios especializados y si se trata de operaciones quirúrgicas existen 2 hospitales de alta complejidad, en nuestras cinco localidades.

Como indica la OMS, la salud debe entenderse no solo como la ausencia de enfermedad, sino “como un bien físico, síquico y social”, con el que todos deberíamos contar. ¡Es un asunto de elemental justicia, además de un derecho fundamental! Por eso, la gobernanza hacia una salud universal tiene que incorporar, como lo ha implementado MiRed IPS, una operación de atención preventiva.

En la búsqueda de un estado de bienestar individual y colectivo se precisa de promoción, control de riesgo, conciencia y responsabilidad del autocuidado. Es a lo que se dedican los ‘Caminantes de la Salud’, un admirable ejército de técnicos y profesionales que recorre a diario sectores de Barranquilla para visitar casa a casa a las familias. Lo hacen en coordinación con gestores comunitarios, líderes barriales y los prestadores básicos. Eso es trabajo colaborativo con enfoque intersectorial para mejorar la calidad de vida de las personas, mientras se detectan a tiempo enfermedades que tratadas de manera segura y oportuna reducen costos del sistema, haciéndolo más rentable en sus manejos administrativos y financieros.

Círculo virtuoso que ha beneficiado a miles de usuarios, a tal punto que el modelo basado en una sincronía de actuaciones de los agentes de la red pública del Distrito lo han copiado otras ciudades del país. La pandemia nos puso de presente la prioridad de la salud que en ningún caso debe ser politizada ni instrumentalizada con fines económicos.

Ganarse la confianza de los usuarios demanda atención oportuna y de calidad, al igual que una intervención constante con las comunidades. En Barranquilla hemos ganado una experticia valiosa que se debe cuidar como el tesoro que es para seguir fortaleciendo día a día el sistema de salud que nos merecemos.