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El tenista alemán Alexander Zverev, número cinco del mundo, sorprendió este sábado en Londres al eliminar por 7-5 y 7-6 (7-5) al suizo Roger Federer (N.3), con una actuación convincente que le permite acceder a su primera final del Masters.

El domingo se encontrará al ganador de la otra semifinal, entre el serbio Novak Djokovic, número 1 mundial, y el sudafricano Kevin Anderson (N.6).

Con 21 años Zverev puede levantar el título más prestigioso de su joven carrera en Londres. El alemán ya tiene tres títulos de Masters 1000 (Madrid en 2018, Toronto y Roma en 2017) pero nunca ha destacado en Grand Slam, donde su mejor resultado son los cuartos de final en Roland Garros de este año.

A la cabeza de la nueva generación, Zverev es el jugador de menos edad en alcanzar la final del torneo de maestros desde el argentino Juan Martín del Potro en 2009. 

El domingo intentará emular a su entrenador, el estadounidense Ivan Lendl, que conquistó el primero de sus cinco Masters en 1982, con 21 años.

'Jugué con Novak hace algunos días aquí y no me fue muy bien (derrota 6-4 y 6-1), por lo que, aunque no quiero que pierda, tengo una ligera preferencia por su adversario', señaló en tono distendido el alemán, haciendo referencia a su partido de la fase de grupos contra el serbio.

Por su parte, Federer tendrá que esperar todavía para festejar el título número 100 en su carrera. A sus 37 años terminará el año como número 3 mundial.

A pesar de su triunfo, Zverev pidió disculpas al público londinense y al propio Federer debido a un punto en el 'tie break' del segundo set que él había parado cuando a un recogepelotas se le cayó una bola. El árbitro permitió repetirlo y Zverev se situó 4-4 con un saque directo, lo que provocó los abucheos de los espectadores.

'Me disculpo por esta situación en el 'tie break'. Es la regla, teníamos que volver a jugar el punto. Me disculpé con Roger en la red, quiero disculparme ante la gente, sé que hay muchos fans de Roger aquí. Estoy apenado por lo que ocurrió', dijo.

Pero el alemán conquistó con justicia su pase a la final. Se mostró sólido y fue mejor en los puntos importantes, con Federer cometiendo errores poco habituales.

Tras ponerse por delante de la leyenda en un primer set muy equilibrado, el público se volcó con Federer en la segunda manga y se entusiasmó cuando logró una rotura para situarse 2-1.

Sin inspiración en las primeras bolas (57% en el partido) e impreciso en ataque (20 errores directos y 13 ganadores), cedió su saque a continuación y mostró que no tenía su mejor tarde.

Condenado a correr por detrás en el marcador, el número 3 se mostró menos agresivo que de costumbre ante un Zverev brillante, sobre todo en la red (9 puntos logrados en 10 subidas en el segundo set), que cerró el partido tras una hora y 34 minutos.