Mauricio Salazar Sierra está acostumbrado a superar pruebas duras. Este manizalita es un hombre de riesgos, apasionado por los carros y la velocidad. Después de coronarse campeón nacional del rally, decidió dar un salto más grande y entonces se inclinó por participar en el Rally Dakar.
El reto fue duro, pero no le quedó grande. La sensación vivida le quedó gustando y después de dos años volverá al ruedo. Salazar será uno de los colombianos que participará en el Rally Dakar del próximo año, que se disputará del 6 al 20 de enero entre Perú, Bolivia y Argentina.
'He sufrido dos veces de cáncer, soy un milagro de Dios porque estoy vivo. El segundo cáncer que padecí fue el mismo que le dio a Hugo Chávez. Esta pasión nace hace 30 años. Donde yo trabajaba mi jefe corría rally y a mí me gustaba. En 2015 creamos la empresa, buscamos patrocinios y participamos en el 2016, donde terminamos toda la carrera y nos ubicamos en el puesto 61', le contó ayer en su visita a EL HERALDO Salazar.
Este hombre de 51 años será el copiloto de Mauricio Salazar Velásquez, otro manizalita, que será el encargado de conducir la camioneta Toyota. Ellos corren por la pasión que sienten por este deporte, pero el principal motor que los mueve es una causa noble. 'Corremos por una fundación de niños que lucha contra cáncer que se llama Alejandra Vélez Mejía. Corremos por el sueño de ellos, que es tener un lote propio. Nuestro equipo se llama MS2 Racing, tiene este nombre porque somos dos Mauricio Salazar, pero no somos familia, solo amigos. Nos conocimos en Manizales', agrega este ingeniero eléctrico.
Salazar Sierra relata que en la primera etapa del rally se dio cuenta de la dificultad de la competencia por eso independientemente de la posición en la que queden, lo importante para él es culminar cada una de las pruebas. 'Un día en el rally comienza a las 4:30 de la madrugada, a esa hora nos levantamos y desayunamos. El carro lo cogemos a las 6 a.m., pero la competencia empieza a las 7 a.m. Son jornadas largas, una etapa es como ir de Barranquilla a Manizales en carretera, pero en trochas y con dificultades. Una vez en Bolivia casi quedamos en un río, nos salvaron unos borrachos que se metieron al río y sacaron la competencia. No es una carrera fácil, pero esto es una pasión', sostuvo.
La preparación
Mauricio Salazar Sierra y Mauricio Salazar Velásquez entrenan en el desierto del Perú, teniendo en cuenta que como toda competencia esta también merece una preparación previa en todos los sentidos. Del 17 al 24 de noviembre estuvieron de nuevo probando su vehículo acondicionado y mejorado por el equipo peruano Proraid.
Desde el 2011, Colombia ha participado en esta competencia en las modalidades de autos, motos y cuatrimotos, exactamente 11 corredores han estado en los recorridos del desierto latinoamericano que ha incluido países como Argentina, Chile, Perú, Bolivia y Paraguay.
Durante la competencia de 9.500 Kms, los deportistas deberán internarse durante 7 etapas de la competencia en los desiertos, atravesando dunas, pero con el objetivo claro representar orgullosamente a Colombia y alcanzar la meta de la Fundación Alejandra Vélez Mejía, la construcción de su sede.