El jueves 6 de junio, se constituyó en una fecha histórica para el corregimiento de Manzana, del municipio de Manaure; histórica porque ese día se puso en funcionamiento la planta potabilizadora, construida gracias a la alianza tripartita entre Ecopetrol, Esepgua y la alcaldía de Manaure, para darle agua potable, por fin, a diez mil habitantes wayuu de la zona, por un valor de 10 mil 500 millones de pesos; agua que llega por el sistema de osmosis inversa, con 6 nuevas pilas públicas y un sistema de energía solar, para mejorar la vida de nuestros hermanos wayuu, que toda una vida han venido tomando agua no potable de los jagüeyes, lo que ha venido ocasionando las enfermedades gastrointestinales y la desnutrición alarmante traducido en miles de muertes de niños wayuu, que es un tema conocido en todo el País.
Estas seis pilas públicas del punto de producción de agua potable Manzana son las siguientes: pila aferente Buena vista, Garciamana, Aurouria, Uriakatz, Sichep y Jaguapía. Son 82 comunidades que se benefician con esta planta potabilizadora, para un total de 1.188 familias, distribuidas así: Manzana 774 habitantes, Buenavista 1091, Sichep 165, Garciamana 437, Aurouria 416, Uriakatz 838 y Jaguapía 1.034 habitantes. Una obra para enmarcar, como todas las que ha venido construyendo Esepgua en toda La Guajira, y esta vez, con un gran aliado, como lo es Ecopetrol.
La vicepresidente de Ecopetrol de Desarrollo Territorial Sostenible, Sandra Lucía Rodríguez Rojas, se sentía satisfecha por esta obra y le daba las gracias a la ingeniera del agua y gerente de Esepgua Andreina García, por esta alianza, así como a la gobernación de La Guajira y al alcalde de Manaure, Jhon Pimienta, por poner a funcionar esta planta potabilizadora en bien de los wayuu.
Las palabras de la ingeniera y gerente de Esepgua, Andreina García, fueron de alegría por el logro alcanzado, de un trabajo en equipo y le manifestaba a la vicepresidente de Ecopetrol y a los asistentes, que se podían construir obras como ésta, con transparencia y dándole un buen uso racional a los recursos invertidos, para, con calidad y objetividad, se vean los frutos.
La ingeniera del agua, haciendo apología a como se le conoce cariñosamente, en medio de sus palabras, se vino tremendo aguacero, que tenía más de un año de no llover en esta zona, lo que indica buen presagio para la inauguración de esta planta potabilizadora de Manzana.
Qué bien por Manzana y sus comunidades, por fin les llegó el agua potable como un milagro de Mareiwa.