¿Por qué no ha escrito usted una de sus crónicas en EL HERALDO, que tenga como personaje central a ‘Don King’, el controvertido personaje del boxeo profesional americano? Se nos dijo en una calle central de Barranquilla.
Bueno, personaje central no lo ha sido este pícaro, pero tangencialmente lo hemos aludido varias veces en nuestras entregas periodísticas. Sobre ‘Don King’ ya parece obligante sobre un personaje que fue y no que es en la actualidad.
Aún sigue operando como promotor, pero ya rebajado considerablemente. El préstamo de un millón de dólares que le hizo en forma por demás artera a Mike Tyson, ya que éste se encontraba tras las rejas, cuando una de las mujeres violadas a “mano fuerte” no aceptó ninguna suma de las que se le ofrecía para zanjar este problema, como sí lo aceptaron, las ‘vírgenes a medias’ en los casos en el que las violaciones sometidas por este apache del boxeo eran zanjadas.
‘Don King’ sabía aprovechar las circunstancias en que se encontraba Tyson y fácilmente le sacó al púgil de las violaciones ese elevado préstamo, ¿para qué? “Para darle seguridad a mi casa de Cleveland”, contestaba King.
La gente del boxeo se preguntaba si ‘Don King’ tenía tantos enemigos que había motivado la transformación de su casa particular en algo así como fortaleza militar. Lo cierto es, que dicen que para que ‘Don King’ reciba un visitante en los actuales momentos, se necesita “Dios y ayuda”, una irreverencia que se usaba mucho en el siglo XlX.
Cuando se comparan los personajes de un espectáculo público como el boxeo (en EEUU el boxeo no tiene categoría de deporte, y por eso su manejo está a cargo de comisiones oficiales, nombrados sus directivos por gobernadores de cada estado) se evidencia que los hombres de antaño manejaban pulcramente el espectáculo, cuando hoy por hoy los desfalcos y las deudas que no se pagan oportunamente, están a la orden del día.
‘Don King’ manejó diferentes espectáculos de boxeo que incluían disputar títulos mundiales. En algunos medios boxísticos se le criticaba cuando rendía informe como promotor, y le incluía al púgil el consumo de una Coca-Cola, pero eso, como se ve, era propio de la ruindad del célebre promotor, cuando todavía da boxeo en la Florida con boxeadorcitos de tercera fila a excepción de un púgil de peso ligero que para algunos pinta como campeón.
El hombre del copete de alambre de púas no parece que pueda volver a sus ‘tiempos dorados’. El préstamo a Tyson del millón de dólares acabó con el poco prestigio que le quedaba.