La prevención de daños al medio ambiente no puede permanecer inmóvil y en esto vienen colaborando –aunque usted no lo crea– algunos políticos vinculados al poder legislativo desde hace muchos años. Lo cual demuestra que sí consideran sus obligaciones con sus electores.
Los problemas del medio ambiente entraron en los círculos políticos desde la célebre Conferencia de las Naciones Unidas, reunida en Rio de Janeiro en 1992. Allí se creó el concepto de Desarrollo Sostenible y se iniciaron acciones públicas de parte de los países participantes en defensa del planeta. En 1993, el Congreso de Colombia aprobó la Ley 99 con 118 artículos se creó el Ministerio de Medio Ambiente y comenzó a organizarse el sector público encargado de la defensa de los recursos naturales y del ambiente. Con la aplicación de esta Ley surgieron muchos institutos, actividades de promoción y control, y comenzaron a crearse corporaciones ambientales regionales.
Pero es hora de reconocer que en este momento, además de la actividad que desarrollan el Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible y los institutos especializados –como Ideam y el Departamento Nacional de Planeación–, dentro del Congreso hay distinguidos políticos que han trabajado y trabajan positivamente por el medio ambiente y se comprometen por el futuro de nuestros recursos naturales. Por eso quiero recordar la actuación de dos congresistas barranquilleros que se le han metido de manera directa a la legislación ambiental, demostrando que sí existe interés político en beneficio y protección de agua, aire, suelos, fauna, flora y de nosotros los humanos: El Dr. José David Name Cardozo, quien consiguió la aprobación de la Ley 1715 de 2014, conocida como ‘Ley de Energías Limpias’, la cual promueve el desarrollo y utilización de fuentes de energía eléctrica renovables y actualmente se está complementando con varias reglamentaciones del Ministerio de Minas y Energía, que permitirán que las fuentes no convencionales ingresen al sistema interconectado existente. Una complementación de los recursos hidroeléctricos con las energías renovables, que le brindará una gran autonomía al país, gracias a este distinguido político barranquillero.
El segundo parlamentario es el Dr. Efraín Cepeda Sarabia, quien se posesionó el pasado 20 de Julio como Presidente del Senado y en su discurso de posesión presentó la situación del medio ambiente como uno de los temas fundamentales en los que trabajará.
Propone continuar con el compromiso de avanzar en el cumplimiento de los “Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU”, que tienen como meta el año 2030. Estos son objetivos que buscan pensar en el desarrollo, más allá de los indicadores económicos que se han mostrado insuficientes, para establecer metas que impacten el bienestar humano. Enhorabuena: ¡Tenemos políticos ambientalistas!