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Propietarios y trabajadores de estancos, billares y discotecas protagonizaron este jueves un plantón en la plaza Alfonso López para exigirle al alcalde Mello Castro que les permita abrir sus negocios, indicando que tras siete meses de permanecer cerrados por cuenta de la pandemia se encuentran en la quiebra.

Señalaron que así como se dio apertura a otros sectores del comercio, bajo el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad, se les garantice su derecho al trabajo. Con pancartas, los manifestantes indicaron que ya no aguantan más, debido a que sus ingresos se fueron abajo en un 100%.

Jorge Eliécer Caro, del sector de los billares, indicó que 'estamos aquí haciendo visible la situación que tenemos, muchas familias dependen de nuestros negocios, en otras ciudades ya abrieron con medidas de bioseguridad, nosotros estamos dispuestos a implementarlas para que nos dejen trabajar, porque prácticamente nos enterraron en vida, estamos agobiados con muchas deudas'.

Indicó que a pesar de los llamados, no han obtenido respuestas por parte de la administración municipal.

Patricia Jiménez, comerciante estacionaria en el balneario Hurtado sostuvo que 'estamos dirigiéndonos al señor Alcalde, pidiéndole que nos deje trabajar, llevamos siete meses con los brazos cruzados, tenemos familias, no sabemos cómo alimentar a nuestros hijos, no sabemos qué hacer, vivimos del día a día, lo único que le pedimos es que nos deje trabajar'.

Por su parte, Jorge Martínez, vocero del sector del entretenimiento nocturno, afirmó que 'los dueños y trabajadores de estancos, billares y discotecas, estamos perjudicados con esta situación, sin contyar con ningún tipo de apoyo estatal, hemos agotado todas las instancias, incluso acudiendo a los organismos de control, pero no tenemos respuestas; aquí estamos unidos por la desgracia, la situación de quiebra, pidiendo que autoricen la apertura de nuestros establecimientos que también le aportan a los entes territoriales con el pago de los impuestos'.

En Valledupar se autorizó la apertura de restaurantes, hoteles, moteles, gimnasios, y otros establecimientos, pero se mantiene la restricción para los negocios de entretenimiento nocturno como bares, estancos y discotecas.