El director ejecutivo de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, calificó como positivo el acuerdo suscrito entre el Gobierno nacional y la banca con el fin de incrementar el crédito para vivienda, industria, manufactura, agricultura y turismo en $55 billones en los próximos 18 meses.
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Aseguró, en el marco del seminario Perspectivas Económicas de Anif en Barranquilla, que con la puesta en marcha de este pacto “se aleja el fantasma de las inversiones forzosas aumentado el costo del crédito”.
Y agregó que este pacto de crédito es un acuerdo de voluntades, donde el interés del Gobierno en generar una reactivación económica para ciertos sectores estratégicos, mientras que los bancos tienen el objetivo de permitir que esos desembolsos se hagan en condiciones de mercado.
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En ese sentido, Mejía dijo que será una estrategia a largo plazo y se priorizarán sectores estratégicos enfocados en el acceso al crédito para las pequeñas y microempresas: “Son típicamente las que tienen barreras para poder invertir y aumentar su capacidad productiva”.
Enfatizó que este acuerdo es un buen ejemplo desde el punto de vista de lo que puede ser un diálogo nacional en la dirección correcta.
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También indicó que si bien las cifras del crecimiento económico para Colombia en el primer semestre del año muestran una mejor economía frente al año pasado, recalcó que una nueva reforma tributaria es inconveniente.
Y agregó que la desaceleración del crecimiento económico tiene que ver con los efectos de las últimas dos reformas tributarias, las cuales “subieron la presión tributaria frente a las empresas y los hogares y que naturalmente terminan desacelerando el crecimiento de la actividad productiva”.
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Por último, señaló que pensar en una nueva reforma tributaria podría poner en riesgo una estrategia de reactivación económica: “Para hablarlo en términos coloquiales, esto es como tratar de sacarle sangre a un paciente anémico”.
