Fue una gran sorpresa, nadie se lo esperaba y quedaron boquiabiertos: Sean Spicer participó del número de apertura de los Emmys de este domingo, que como se preveía comenzaron sazonados con mucha política.
'Será la mayor audiencia en presenciar un Emmy, punto, tanto en persona como en todo el mundo', dijo el exsecretario de prensa de la Presidencia de Estados Unidos, detrás de un podio similar al de la Casa Blanca.
Era Spicer de verdad y no la parodia con la que Melissa McCarthy se ganó un Emmy creativo la semana pasada.
El comediante Stephen Colbert, anfitrión de la noche, también dedicó varios de sus afilados chistes al presidente Donald Trump, nominado a dos Emmys por su programa 'El Aprendiz'.
Pero 'a diferencia de la Presidencia, los Emmys van al ganador del voto popular', dijo Colbert entre las risas de los presentes.
Primeros ganadores
'Veep', otra comedia política, recibió en total 17 nominaciones, incluida la de mejor serie de comedia y mejor actriz para Julia Louis-Dreyfus, que también suena como favorita a alcanzar su sexto Emmy por su papel en la desventurada vida de la expresidenta Selina Meyer.
'Saturday Night Live' (SNL) de NBC recibió 22 nominaciones -la mayor cantidad al lado del show de ciencia ficción de HBO 'Westworld- por una serie de 'sketchs' en los que Alec Baldwin encarna al mandatario, que ha calificado la imitación de 'tendenciosa' y 'nada graciosa'.
Kate McKinnon ganó por segunda vez consecutiva el Emmy a mejor actriz de comedia de reparto, con su interpretación de la demócrata Hillary Clinton y luego a la asesora presidencial Kellyanne Conway.
Entre lágrimas, McKinnon agradeció a la excandidata por su 'gracia y coraje'.
John Lithgow ganó como mejor actor de reparto de drama por su papel como el primer ministro Winston Churchill en 'The Crown', sobre el ascenso al trono de la reina Isabel II.
'En estos tiempos tan locos' la vida de Churchill 'aún como un hombre viejo nos recuerda cómo luce tener coraje y liderazgo en un gobierno', indicó.
Moss favorita
Donde será necesaria la bola de cristal será en el género drama.
'Downton Abbey' es historia y 'Juego de tronos' está fuera de competencia, por lo que la categoría de drama está muy abierta y competida con muchos aclamados programas debutando este año.
La serie de fantasía épica de HBO sobre familias nobles peleando por el control del trono de Hierro, alcanzó un récord de 12 premios el año pasado, pero no entró en esta edición porque comenzó su séptima temporada muy tarde para ser considerada por los jurados.
En su monólogo de apertura, Colbert recomendó a los ganadores agradecer 'principalmente a 'Juego de tronos' por no ser elegible este año'.
Es que su ausencia dejó el campo abierto para muchas aclamadas series debutantes, incluidos 'Westworld'; la historia distópica de 'The Handmaid's Tale' de Hulu, en la que su protagonista Elisabeth Moss encabeza las encuestas al premio a mejor actriz; y la serie de terror 'Stranger Things' de Netflix.
Está también 'The Crown' (Netflix), que ganó dos Globos de Oro, y el drama familiar 'This Is Us' de NBC.
Las re-nominadas 'Better Call Saul' (AMC) y 'House of Cards' (Netflix) no hicieron más fácil el trabajo de los jurados.
'Stranger Things', que ya ganó cinco de los Emmys creativos al tras cámara, entregados la semana pasada, es vista como ganadora a mejor serie dramática por casi todos los expertos de Gold Derby.
Aunque los sitios especializados Variety y The Hollywood Reporter se lo dan a 'This is Us', que aparece con uno de sus protagonistas, Sterling K. Brown, como favorito a mejor actor del género.
SNL, que lleva dos de las cinco estatuillas a las que aspira el domingo, se llevó también cinco Emmys creativos.