El crimen por el cual es señalado ocurrió en febrero del 2019 cuando la víctima defendía a un allegado de un atraco.
El juez había rechazado el pedido de la defensa de una libertad ambulatoria o arresto domiciliario, a cumplir en una mansión tasada en 800.000 dólares.
El exfutbolista y estrella del fútbol mundial es imputado por el uso de un pasaporte paraguayo adulterado.
El juez sostuvo que por la magnitud de la causa y la aparición de nuevas evidencias, además del involucramiento de funcionarios públicos y empresarios que propiciaron la llegada de Ronaldinho a Paraguay, se requiere de su presencia en Asunción.
Los investigadores descartaron solicitar arresto domiciliario en lugar de prisión preventiva alegando que el expresidente de Perú no padece enfermedad grave.