Los establecimientos educativos y las entidades descentralizadas se podrán acoger a esta medida.
Con esta acción la Policía Nacional afecta de manera directa el mando, el control territorial y las finanzas de la organización criminal.
Esta acometida sin precedentes llevó al crimen organizado a responder como siempre lo ha hecho cuando se siente acorralado y desesperado: ponerle precio a la vida de los policías de la patria y atentar contra la población civil. La cuota de sacrificio ha sido muy alta y dolorosa.
Hay 44 aeronaves para monitoreos, 1.563 gestores de convivencia están desplegados, así como 2.760 policías de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (Undmo).
Las pruebas de las intimidaciones contra el director de la Policía Nacional ya están en manos de la Fiscalía.