Los niños se encontraban a bordo de una bicicleta eléctrica de reparto, que cuenta con un carrito que se engancha al frente del vehículo y que permite transportar niños, mascotas o cargas.
Ocho personas resultaron heridas luego de que el vehículo se subiera a un andén y los atropellara. Frenos no le habrían respondido al chofer.
En un informe de abril, el ICBF reportó la atención diaria de 66 casos con niños afectados.
Los escolares, todos menores de 10 años, iban de camino a clase cuando un tren de pasajeros impactó con el vehículo. Otros cinco niños están gravemente heridos.
El ente de control disciplinario investigará a funcionarios de la Secretaría de Salud del Cesar, por su presunto descuido en el control del suministro de medicamentos, al parecer falsos, a las víctimas.