La Procuraduría instó a la UNGRD a adoptar medidas inmediatas para mitigar riesgos y salvaguardar la vida de los habitantes de la isla.
El Ministerio Público advierte al Gobierno que no puede improvisar como lo hizo durante el Fenómeno de El Niño.
Expertos advierten sobre la vulnerabilidad y lo que tiene que ver con qué tan preparadas y resistentes son las poblaciones para afrontar los fenómenos naturales.
Estamos en las manos de la Ungrd, tristemente degradada a un cartel de corrupción, sacudida en su interior por los efectos de un potente huracán categoría 5, herencia de Olmedo y Pinilla. La desconfianza en su gestión es proporcional a los desafueros que estos cometieron. Pese a las buenas intenciones de su actual dirección, se les echa el tiempo encima, los frentes a intervenir se multiplican y no parece que esté lista. El que todavía no sabe rezar, que aprenda cuanto antes.
El fenómeno natural, que se desplaza por el pacífico mexicano, en menos de 12 horas ha pasado por las categorías 1, 2, 3 y 4.