El ministro de Defensa era uno de los que más tenía tiempo en el cargo.
En otro país menos descompuesto, con tanto político adicto a la mermelada de la Casa de Nariño y tantos rabos de paja, Petro no hubiera ratificado a Benedetti o, desde noviembre, se habría rebelado la cúpula petrista, en contraste, cada vez más acomodada al neoliberalismo de Petro y a la abyección de Gustavo Bolívar.
El presidente le pidió la renuncia protolocaria este domingo a todo equipo de gobierno tras las recriminaciones televisadas el pasado martes en el pasado martes.
La funcionaria no aclaró su renuncia es protocolaria o de manera irrevocable.
El excanciller aseveró que el presidente cayó en un profundo caño.