Con base en 17 testimonios, la Fiscalía estableció que no murió por infarto ni por un cortocircuito de su camioneta, como se dijo inicialmente.
Las autoridades capturaron a la esposa del ganadero, al conductor y asistente de negocios personales y a un adolescente. El hecho se registró en junio de 2016.
El hombre sería coautor del crimen, según la Policía. El comerciante guajiro había recibido amenazas en 2012.