Cuando los feligreses de la Basílica de San Benito Abad vieron salir esposado a Darwin Navarro Castillo, por hurtarse parte de las ofrendas de El Milagroso de la Villa, pensaban que su calvario apenas iniciaría.
Este joven fue descubierto la tarde del lunes cuando cogió de los pies del patrono del municipio de San Benito, una suma de dinero, hasta ese momento desconocida por los nativos que reprocharon aquel hecho.
Cuando apenas el cuento se calentaba como llama en el infierno, Navarro fue dejado en libertad por la Fiscalía Séptima Local de Sincé al considerar que la cuantía que le fue decomisada era mínima, solo 8 mil pesos en monedas.
El milagro para Navarro no estaba dado, la justicia divina llegó con su mano poderosa y al medio día de hoy fue recapturado, esta vez no por el dinero que le hurtó a El Milagroso simulando ser un hombre de fe que llegó a sus pies a pedir piedad; el delito que le indilgaban era el de deserción.
El joven, de 21 años, se escapó del Ejército desde el pasado 24 de marzo.
El vicario general de la Diócesis de Sincelejo, Adalberto Sierra Severiche, dijo que casos como este se han presentado en reiteradas ocasiones tanto en San Benito así como en la Catedral de Sincelejo por lo que tuvieron que instalar cámaras de vigilancia.
'A la Catedral llegaban personas muy recursivas que a una varilla de madera le ponían en la punta una bola de chicle y así 'pescaban' billetes y los sacaban de las alcancías', explicó el vicario.
Estas prácticas ya no se presentan por la instalación de cámaras, sin embargo, aseguró que en algunas parroquias que no cuentan con esos sistemas de vigilancia persisten los robos
