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Con la llegada del nuevo año, muchas personas se comprometen con la tradición de establecer nuevas metas y tener cambios de actitud para comenzar con el pie derecho.

Sin embargo, más allá de la lista de objetivos, el inicio de año debe verse como una gran oportunidad para profundizar verdaderamente en la mejora de hábitos, el fortalecimiento del amor propio y la autoconfianza.

Para lograr tener un cambio significativo y satisfactorio en la vida de cualquier persona, es imprescindible trazar metas claras, también dejar de lado el “mejor lo hago mañana” y comenzar a decir “lo haré, así sea por cinco minutos”.

Para profundizar en la consecución de objetivos claros, EL HERALDO dialogó con las psicólogas María Eugenia Sarmiento y Luna Medina, quienes compartieron algunos consejos claves para lograr concretar aquello que anteriormente solo quedaba como un ideal.

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Reflexión del pasado

Antes de fijarse nuevas metas, es importante detenerse y reflexionar sobre lo que sí se pudo hacer en el año anterior.

Hay que hacerse preguntas como: ¿Qué salió bien? ¿Qué salió mal? ¿En qué áreas necesito mejorar? Este ejercicio de autorreflexión permitirá establecer objetivos mucho más realistas y alineados con sus intereses y deseos para el nuevo año. Así lo explica Luna Medina.

“Es importante que las metas sean claras y alcanzables. Utilizar el método SMART genera un cambio importantísimo. Esto significa tener metas específicas, medibles, alcanzables, relevantes y con plazo determinado; por ejemplo, en lugar de decir: ‘Quiero estar más saludable’, una meta más concreta sería: ‘Quiero hacer ejercicio 3 veces por semana durante 30 minutos’”, anotó la experta en salud mental.

Ordenar de mayor a menor

Las metas muy grandes pueden causar mucho miedo o dudas, pero la clave de esto es hacerlas más alcanzables con el pensamiento. Para ello, se pueden dividir en pequeños pasos, puesto que esto no solo facilita el proceso, sino que también da una sensación de logro cada vez que se alcanza un objetivo pequeño. Por ende, aumentará la motivación para continuar trabajando hacia la meta final.

“Esto va de la mano indiscutiblemente con la motivación, así que la idea es buscar algo que nos mueva y nos impulse a hacer las cosas. Esto va alineado con los valores personales y de bienestar.

Hazte esta pregunta: ¿Por qué quiero alcanzar esta meta? Si la respuesta está relacionada con tu crecimiento, salud y bienestar, estarás más motivado para seguir adelante”, dijo Luna.

Aceptar los retos

Es probable que la mayoría de las personas enfrenten retos u obstáculos en el camino, por lo que la flexibilidad es clave.

La calma y la habilidad de buscar soluciones es una tarea que toda persona con metas debe desarrollar. El remedio a esto no es frustrarse si algo no sale como se planeó, lo importante es seguir avanzando.

“Para afrontar y superar los miedos y las frustraciones, lo primero es aceptar que estamos teniendo una crisis de pánico ante el fracaso. Uno de los métodos que pueden funcionar para mantener la calma es que se aprenda a controlar la respiración mediante técnicas de relajación”, afirmó María Eugenia Sarmiento, magíster en Psiconeuropsiquiatría y Rehabilitación.

La experta añade que estos cambios se hacen con el tiempo, y las acciones deben convertirse en un hábito para poder transformarse así en una persona que es capaz de lograr cualquier cosa que se proponga.

Trabajar en la autoestima

La autocompasión es crucial para mantener la motivación. Reconocer los logros, aprender de los desafíos y seguir adelante sin ser demasiado duro consigo mismo será la clave más importante.

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“Para trabajar en la autoestima y confianza para que las personas se sientan más seguras al perseguir sus metas, es necesario en primer lugar que el individuo acepte sus cualidades y debilidades. Segundo, que empieces a trabajar en las afirmaciones positivas. Tercero, poner en práctica hobbies que lo hagan sentir bien y valorar los logros que día a día estás alcanzando”, expresó María Eugenia”.

Renovar metas

Establecer metas anuales es una estrategia clave para el desarrollo personal y profesional. Según estudios de psicología, tener objetivos claros y alcanzables puede aumentar significativamente la motivación y la productividad. Al definir metas, las personas pueden enfocarse en lo que realmente importa, priorizando acciones que les acerquen a sus sueños y aspiraciones.

La capacidad de adaptarse y aprender de las experiencias pasadas es una de las principales características de aquellos que logran un crecimiento constante.

La sensación de logro que se experimenta al alcanzar un objetivo personal puede generar una mayor autoestima y bienestar emocional. Además, el establecimiento de metas promueve la disciplina y la resiliencia, habilidades esenciales para enfrentar los obstáculos de la vida.

“Elaborar una lista de metas para el año nuevo no es solo un ejercicio de establecer propósitos, sino de definir objetivos claros, alcanzables y alineados con nuestros valores y bienestar. Haz de este 2025 un año de crecimiento personal y éxito”, afirmó la psicóloga clínica Luna Medina.