Con 111 años, John Alfred Tinniswood ha sido reconocido por el Guinness World Record como la persona más anciana que habita el planeta. Este contador público de profesión recibió la certificación en abril de este año, después de las muertes del venezolano Juan Vicente Pérez, de 114 años, y de Gisaburo Sonobe de Japón, de 112 años.
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Tinniswood ha vivido una vida larga y, a pesar del paso del tiempo, asegura mantenerse activo y conservar muchos de sus recuerdos. Durante una charla con los medios de la organización de los récords, compartió algunos consejos para las generaciones venideras sobre cómo vivir una vida longeva.
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Entre sus recomendaciones, Tinniswood destacó la importancia de mantener una dieta equilibrada y mencionó que una de sus claves ha sido comer pescado con papas fritas todos los viernes. “La moderación y la buena suerte son esenciales para una vida larga”, afirmó.
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El centenario también habló sobre su juventud, describiéndola como tranquila. Contó que nunca probó un cigarrillo y rara vez consumió alcohol. Reconoció que 'si haces cualquier cosa en exceso, eventualmente sufrirás las consecuencias'.
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A lo largo de su vida, Tinniswood ha sido testigo de numerosos cambios y eventos históricos. A pesar de ello, ha mantenido una filosofía de vida basada en la moderación y la prudencia, lo que, según él, ha contribuido significativamente a su longevidad.
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John Alfred Tinniswood sigue siendo un ejemplo viviente de longevidad y sabiduría. Su reconocimiento por parte del Guinness World Record no solo celebra su avanzada edad, sino también su estilo de vida y las elecciones que ha hecho a lo largo de los años.
La comunidad internacional ha mostrado gran interés en su historia, y muchos buscan aprender de sus consejos para aplicar en sus propias vidas. Tinniswood ha demostrado que, con moderación y un poco de buena suerte, es posible alcanzar una edad avanzada y disfrutar de una vida plena.
En sus declaraciones, también resaltó la importancia de mantenerse activo y conectado con los demás. A sus 111 años, sigue participando en actividades que lo mantienen involucrado y comprometido con su entorno, algo que considera fundamental para su bienestar.
