Colombia es, sin duda alguna, cuna de grandes talentos desde escritores de la talla de Gabriel García Márquez, pintores como Alejandro Obregón y Fernando Botero, y escultores como Rodrigo Arenas Betancourt, figuras que han dejado una huella imborrable en el panorama artístico colombiano.
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Sin embargo, los esfuerzos por darse a conocer en estos medios no siempre son suficientes, en especial para el talento joven e inexperto en relacionamiento. Es bajo esta premisa que la barranquillera Lianette Certain creó la Fundación Cergui.
Como una luz esperanzadora para los artistas emergentes, esta apasionada del arte y curadora amateur ha inaugurado la primera residencia privada de arte en el país, marcando así un hito en la historia cultural colombiana.
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Lianette ha transitado un camino ecléctico que la ha llevado por diferentes países de América Latina, tejiendo a su paso una red invaluable de contactos y amantes del arte. Su trayectoria como diseñadora de moda y mercadóloga se entrelaza con su pasión por el arte, desembocando en la creación de la Fundación Cergui.
'Esta iniciativa nace de la necesidad evidente de brindar apoyo a los talentos emergentes en un país rico en creatividad, pero con escasos recursos para su desarrollo', sostiene la barranquillera.
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La Fundación Cergui ofrece a artistas colombianos y de América Latina la oportunidad de residir y trabajar en Pereira durante un mes, proporcionando un espacio para la libre expresión y el crecimiento artístico, además de una inmersión completa en el Eje Cafetero, declarado patrimonio mundial.
'Esta residencia no es un semillero, los artistas que aquí vienen ya tienen una trayectoria impecable, lo que nosotros hacemos desde la fundación es abrir esa puerta hacia el público internacional', sostuvo en su diálogo con EL HERALDO.
