Concebida desde la espontaneidad, Barranquilla evidencia su desarrollo urbanístico con características precisas que se remontan hacia el año 1857 cuando esta alcanzó la categoría de ciudad.
En una curiosidad urbanística, en su planeación el icónico barrio fue diseñado para que se orientara 22 grados al noreste, convirtiéndose en un corredor para el viento.
Concebida desde la espontaneidad, Barranquilla evidencia su desarrollo urbanístico con características precisas que se remontan hacia el año 1857 cuando esta alcanzó la categoría de ciudad.