De niño el barranquillero Mauricio Camargo Támara solía ser 'inquieto'. Así lo recuerda su madre, la médico Vivianne Támara, quien acompaña su relato con la anécdota en la que, mientras le enseñaba a leer a otro de sus hijos, Mauricio, con solo dos años, se quedaba cerca para aprender.
En el colegio, agrega, sobresalía por sus calificaciones. También tenía cierta destreza para tocar el piano, jugar fútbol y béisbol, pero una rotura en el ligamento cruzado frenó su carrera deportiva.
Vivianne resalta que Mauricio se graduó en el Colegio Británico Internacional, donde fue elegido como personero del cuerpo estudiantil y recibió honores con el mejor récord académico de su clase.
'Mi hijo me decía que iba a ser capaz de estudiar becado en una de las mejores universidades de Estados Unidos y así fue. Se ganó una beca en la Universidad de Brandeis, en Boston, Massachusetts (Estados Unidos), para las licenciaturas Física, Biofísica y Economía. De allí se graduó con honores y fue inducido a Phi Beta Kappa, la Sociedad Académica Honoraria más antigua y selecta de Estados Unidos. Luego obtuvo otra beca en la Universidad de Harvard, donde cursó la maestría en Administración de Empresas (MBA). También culminó una maestría en Ciencias y Tecnologías de la Salud, en la Escuela de Medicina De Harvard y en la Escuela de Ingeniería del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT)'.
Su progenitora cuenta que Mauricio se moldeó profesionalmente en la firma consultora McKinsey & Company, cuyo periodo lo dedicó a asesorar a líderes corporativos, políticos y de salud pública en las industrias hospitalarias, farmacéuticas y de tecnologías de la salud. Posteriormente, en 2016, fue nombrado vicepresidente ejecutivo de Estrategia y Planeación en HCA Healthcare, en Houston, 'la organización hospitalaria más grande del mundo'.
Su trabajo en la pandemia
Mauricio Camargo, de 36 años, destaca que proviene de una 'familia de médicos', así que sus títulos profesionales, un poco desviados de la tradición genética, lo hacen ser 'una de las contadas ovejas negras que no decidieron estudiar Medicina'. Aun así declara que el sector salud lo lleva 'en el corazón'.
Llegó a HCA Healthcare 'en el momento adecuado' para crear desde cero un departamento de estrategias y planeación, en el que arrancó solo; hoy cuenta con un equipo conformado por más de 15 personas y una red hospitalaria con más de 180 hospitales en Estados Unidos y en el Reino Unido. Uno de sus logros dentro de la empresa —manifiesta— fue su trabajo liderado en la adquisición e integración operacional de varios hospitales en 2017 y 2018.
'Se dio la oportunidad en Houston porque esta ciudad venía presentando un bajón en la industria petrolera. Cuando se dan este tipo de situaciones hay muchas organizaciones, incluyendo el sector salud, que sufren un poco y se ponen a la venta, así que tuvimos la oportunidad de ver cuatro hospitales en 2017 y uno más en 2018, los cuales evaluamos y nos dimos cuenta que su trayectoria era positiva y que podía haber sinergia con la familia de HCA. Y Comienza ahí, con números, con data y evaluaciones financieras, y llega un punto en que se toma una decisión, y si la decisión es positiva, se hace una propuesta y si se acepta luego empieza el proceso de integrar cinco organizaciones nuevas. Hoy cada uno de esos hospitales ha crecido en la calidad de sus servicios'.
Dentro de sus proyectos actuales confluyen el cambio del enfoque de la organización durante este año, debido a la contingencia generada por la Covid-19, sobrellevando la situación y reinventándose en los roles y en las funciones. También —manifiesta— ha estado concentrado en la consolidación de las plataformas virtuales de salud y telemedicina que venían trabajando hace un tiempo, pero que con la 'catálisis' de la pandemia han aumentado los esfuerzos en proyectos a corto plazo para lograr un desarrollo en esta área.
Explica que dentro de los retos que enfrentaron a nivel profesional durante el crecimiento vertiginoso de los contagios, estuvo el hecho de encarar la realidad representada en dos olas de casos y, pese al contexto, mantenerse, descartando 'los cierres económicos'. En cuanto a lo personal, en mayo 7 de este año, en la mitad del primer cierre nacional por la Covid-19 (en Estados Unidos), recibió a su segunda hija, Julia.
En su cargo de vicepresidente ejecutivo Mauricio se dedica a la búsqueda de oportunidades de crecimiento en el portafolio de activos y de programas o servicios clínicos. A su vez, en cuanto a la planeación, se dedica a poner sobre el papel las estrategias que materializarán, y a designar recursos financieros y humanos para llevar a cabo lo trazado a corto y largo plazo. Por último —dice— está ejecutar todo lo planeado.
'Mi trabajo también me ha convertido en el consejero principal de la organización, así que cuando existe una decisión difícil de tomar, me consultan para dar mi punto de vista, sobre todo aquellos asuntos que involucran desarrollo de capital y que requieren recursos'.
Sin duda los días de Mauricio están ambientados por el sonido de la sirena de una ambulancia. Abrirse campo en el sector de la salud en Estados Unidos, siendo latinoamericano, le ha permitido encontrar personas que le han tendido la mano sembrando un 'granito de arena de conocimiento'. Resalta que también ha contado con 'la fortuna' de tener 'excelentes mentores y mentoras', y de formarse en ese país, donde ha abierto su mente para apostarle al sector salud sin ser profesional de la Medicina.