En medio del segundo día de la II Asamblea Extraordinaria Nacional de la Farc se conoció que la Dirección de la colectividad surgida de la desmovilización tras el acuerdo de paz de La Habana plantea el nombre de Comunes para identificar en adelante las toldas de la antigua guerrilla.
Esto porque, afirman, el nombre de Farc estigmatiza a los exrebeldes y ya van más de 250 asesinados y, así mismo, porque los pone de homónimos de la Segunda Marquetalia, también denominada Farc, constituida por desertores de la paz.
La vicepresidenta del Senado, Sandra Ramírez, quien hace parte de la comisión para el cambio de identidad del partido, indicó en sus redes sociales: 'El viernes avanzamos en la aprobación del orden del día y los responsables de las comisiones, lo hicimos en medio de fraternidad y armonía, de hermandad, de construcción de partido. Hoy trabajamos en las diferentes comisiones que se nos han asignado'.
Estas comisiones y la plenaria, explicó, deberán plantear las conclusiones que serán aprobadas al final de la asamblea.
'Avanzamos en la discusión por comisiones, para estos espacios se escogieron sus encargados de la siguiente manera: Pablo Catatumbo para declaración política, Carlos Lozada en estrategia electoral, Rodrigo Granda para plataforma política, Mauricio Jaramillo en cuanto al cambio del representante legal y Fancy Orrego en conclusiones', se lee en una publicación de la Farc en Twitter.
Entre tanto, Lozada explicó que en materia electoral 'se trata de hacer un balance de lo que fue nuestra participación en los comicios electorales de 2018 y 2019 y sobre esa base proyectar cómo debe ser nuestra participación de cara al proceso electoral de 2022 y en desarrollo de una propuesta de una gran convergencia por la paz, la vida y la democracia. Eso debe posibilitarnos iniciar conversaciones con todos los partidos y organizaciones políticas y sociales interesadas en que en 2022 elijamos un gobierno y un Congreso de mayorías, que asuman la tarea de llegar a una paz completa y definitiva y reconstruir el país para iniciar una etapa de progreso y desarrollo'.
En la asamblea se estiman que participen más de 250 delegados, que se reúnen algunos de manera presencial en distintas regiones y otros de manera virtual.
En contra de la asamblea surgió una facción al interior de la propia Farc, liderada por Milton de Jesús Toncel y los senadores Victoria Sandino e Israel Zúñiga, quienes anunciaron no serían parte de la convención, pues 'va en contravía del espíritu del acuerdo de paz, de nuestra tradición revolucionaria y de los elementales principios democráticos consagrados en la normatividad vigente'.
