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La Procuraduría General informó el viernes que solicitó a la Cancillería 'la adopción inmediata de acciones de asistencia jurídica, encaminadas a obtener la pronta liberación de 61 (58 permanecen detenidos) colombianos presos en Venezuela'.

La Procuraduría Delegada para la Vigilancia Preventiva de la Función Pública le dice a la canciller María Ángela Holguín que después de analizar las normas que se aplican a los asesores jurídicos de la Cancillería, 'no existe impedimento para brindar asistencia legal a este grupo de 61 connacionales y lograr la protección de sus derechos y su liberación inmediata'.

Se lee en la misiva: 'Señora Canciller, dada la actual coyuntura en Venezuela, comedidamente le solicito diseñar, implementar y comunicar a este despacho las decisiones y acciones que al respecto adopte y adelante, respectivamente, dentro del marco de sus funciones, para garantizar la superación del estado de cosas de referencia para estos colombianos'.

Al darle un plazo de cinco días al despacho diplomático, advierte el ente de control disciplinario que según las notas consulares, 'es función de los asesores jurídicos orientar y hacer seguimiento a los procesos en que sean parte los colombianos que hayan solicitado asesoría a los consulados, actuando de manera institucional ante las autoridades competentes y no a manera de apoderado de estos'.

Pone de presente el Ministerio Público que los colombianos, la mayoría de la Región Caribe, detenidos en Venezuela hace más de un año como parte de la llamada ‘Operación de liberación del pueblo’, donde se les señaló de ser parte de un grupo paramilitar, 'no han sido acusados de ningún delito y pese a que un juez el pasado 21 de noviembre ordenó su libertad, las autoridades administrativas del vecino país indicaron que no cumplirían la sentencia'.

Ya está en Colombia

La mañana de este viernes llegó a Cúcuta Martín Gutiérrez Cera, uno de los 59 colombianos detenidos en Caracas. El barranquillero, de 61 años de edad, ingresó con el estado 'de expulsado', pese que días atrás se había anunciado que sería liberado como medida humanitaria, debido a su estado de salud.

'Fue un viaje por carretera de más de 14 horas. Padecí el pasado 30 de octubre un derrame cerebral, pensé que otro sería el trato. Pero me botaron como un perro de Venezuela, sin yo haber hecho nada. Me quitaron mis documentos, mis apuntes de teléfono', manifestó el hombre en diálogo con EL HERALDO.

Gutiérrez señaló que se encuentra en la casa de paso Divina Providencia, o Casa del Inmigrante, en Cúcuta, desde allí solicitó al gobierno para que le 'ayuden con su traslado a Barranquilla'.

'Pido a quienes me puedan ayudar, sobre todo al Gobierno nacional, para mi traslado a Barranquilla. Mi familia no sabe que yo estoy acá, perdí los números de teléfonos, no pude comunicarme con ellos', insistió el hombre.

Gutiérrez narró que la mañana del pasado 15 de octubre fue sacado del centro de reclusión en Caracas y llevado a los calabozos del Servicio Administrativo de Identificación Migración y Extranjería, en Caracas.

'Allí creo que toqué fondo con todo esto. ¿Cómo pueden las autoridades y los organismos permitir tantas violaciones? A mi edad en estos últimos meses he vivido lo peor', dijo con una voz entrecortada que le impedía modular las palabras.

Este medio logró contactar a la familia de Martín Gutiérrez, quienes manifestaron 'desconocer la situación por la que pasó en Caracas. 'Nunca nos esteramos por lo que pasó mi primo, todo esto nos tiene impactados', señaló Adisney Cera.