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La vicefiscal Martha Janeth Mancera reportó este martes que actualmente están en etapa de juicio en el país 40 casos que tienen como víctimas de abuso sexual a menores de edad pertenecientes a comunidades indígenas.

Dijo la funcionaria que para el ente acusador 'toda agresión sexual que tenga como víctimas a niños, niñas y adolescentes es prioridad, por ello se diseñó una política de acceso oportuno y efectivo en donde no solo se investigan los hechos sino el contexto en el que ocurrieron, permitiendo un abordaje integral en atención a los menores hasta la judicialización de los responsables'.

Agregó en este sentido que 'los casos donde la víctima es un menor de edad perteneciente a las comunidades indígenas, son casos priorizados. Hoy tenemos 40 casos en etapa de juicio y nueve casos en investigación'.

El pronunciamiento de Mancera tiene que ver con el hecho que se dio a conocer el pasado lunes, en el que en septiembre pasado una menor indígena de la comunidad nukak makú fue secuestrada y violada por varios militares.

El caso salió a la luz una semana después de que siete soldados aceptaran cargos por haber violado también a una menor indígena de la comunidad embera chamí en Risaralda.

'Un fiscal de la Dirección Seccional del Guaviare conoció el 19 de septiembre de 2019, por información del hospital de San José, sobre el ingreso de una menor indígena de la comunidad nukak makú, quien relato haber sido víctima de agresión sexual el 8 de septiembre de 2019 por soldados que prestan su servicio militar obligatorio en la vereda Charras, del mismo municipio', indicó la vicefiscal.

Explicó al respecto que la estrategia investigativa del fiscal del caso 'se basa en la recolección de más de 20 actividades, entre las que se cuenta con la información de la comunidad indígena para lo cual se ha usado un intérprete, permitiendo conocer el contexto en el que ocurrieron los hechos. Se continuó con las actividades investigativas que permitirán tomar la decisión que en derecho corresponda'.

Reiteró además Mancera que actualmente la menor se encuentra bajo protección del Icbf, donde se adelanta el trámite administrativo para salvaguardar sus garantías y restablecer los derechos violentados, 'con especial consideración hacia su condición de miembro de la comunidad indígena'.

En la denuncia de la víctima, que tiene 15 años de edad, se lee que el día de los hechos, un domingo, ella estaba en la vereda Charras, de San José del Guaviare, y se separó de una amiga para ir al baño. Al salir dos soldados la secuestraron y se la llevaron al Batallón de Infantería No. 19 General José Joaquín París, en la capital del Guaviare.

Allí, cuenta, la tuvieron en contra de su voluntad ese domingo, el lunes, el martes, el miércoles, el jueves y la mañana del viernes. Los dos soldados, dice, la obligaron a tener relaciones sexuales con ellos una y otra vez.

Agrega que no fue atada, que no le dieron de comer, que la doblegaron, y que el viernes en la mañana pudo escaparse. Al interponer la denuncia respectiva, no obstante, la comunidad indígena advierte que han llegado amenazas hasta el resguardo.

Los nukak makú dijeron además que los dos soldados violadores ya terminaron de prestar su servicio militar en el Ejército y que nunca los investigaron.

En un informe entregado por esta etnia a la Comisión de la Verdad en 2018, la comunidad ancestral pone de presente que las mujeres de este pueblo indígena han sido víctimas por años de violencia sexual por parte de colonos, grupos ilegales y la misma fuerza pública.