Para la sanción presidencial quedó el proyecto de ley anticorrupción que regula los conflictos de interés de los congresistas y que fue uno de los puntos de la frustrada consulta anticorrupción del año pasado.
La iniciativa, aprobada la semana pasada en el Capitolio, busca que los congresistas, sus familiares y cónyuges revelen el conjunto de sus bienes y propiedades para evitar el conflicto de interés. Así las cosas, el proyecto persigue modificar, parcialmente, la Ley 5ª de 1992 (Reglamento del Congreso), en relación con los conflictos de interés de los legisladores.
'Es un proyecto que da transparencia, publicidad e información al ciudadano sobre los conflictos de interés de los congresistas. Es una norma que viene de la Mesa Técnica Anticorrupción, que convocó el presidente Iván Duque, y que lideró la ministra (del Interior) Nancy Patricia Gutiérrez, y hoy culmina su trámite legislativo', dijo el viceministro de Relaciones Políticas, Francisco José Chaux.
Sin embargo, desde la oposición, que abanderó la consulta de 2018, se escucharon voces de rechazo a lo aprobado.
El senador Gustavo Bolívar, de los Decentes, señaló que la iniciativa avalada es 'una burla al país y a 11,7 millones que votaron la consulta anticorrupción: el Senado acaba de reformar la ley 5, para que en adelante los congresistas podamos defender intereses, contratos y nombramientos de tíos, sobrinos, primos, etcétera, sin entrar en conflicto de interés. Vergonzoso'.
A su vez, el representante del Polo, Germán Navas Talero, advirtió al respecto: 'Es tan turbio el actual Congreso que en un proyecto anticorrupción avalado por el Gobierno y ñcon el voto unánime del Centro Democrático, se dio vía libre al nepotismo y se redujeron inhabilidades familiares. Ahora los congresistas pueden votar leyes que favorezcan a sus primos y cuñados gracias al presidente Duque y su bancada del Centro Democrático, el Partido Conservador, algunos liberales, La U, Cambio Radical y el cristiano Mira'.