Compartir:

La falta de garantías y protección a los defensores de Derechos Humanos en Colombia es el principal incumplimiento de las recomendaciones hechas en 2013 por el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas al Estado colombiano.

Esta fue una de las conclusiones a las que llegaron los actores de Justicia, representantes de la Oficina de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y Defensoría del Pueblo en un balance entregado en la Universidad Rafael Núñez, de Barranquilla.

Una de las recomendaciones fue la de fortalecer las garantías para los defensores de DDHH.

'La falta de garantías y protección para quienes hoy defienden los derechos humanos en Colombia ha sido el principal incumplimiento y hoy se ratificó esa preocupación en el tercer ciclo del Examen Periódico Universal', manifestó Brenda Blanco, representante de la Coordinadora Colombia, Europa, Estados Unidos, plataforma de Derechos Humanos de la ONU.

La delegada recordó que Naciones Unidas y el programa ‘Somos Defensores’, en su último informe, reportó 48 asesinatos en lo que va corrido del presente año y 281 agresiones contra defensores de DDHH a nivel nacional, desde que se firmaron los acuerdos de paz.

'Los casos de agresiones aumentaron en un 43% en Colombia. Este tema para nosotros ha sido un proceso complejo, porque a través de la firma del acuerdo se ha mejorado en muchos aspectos de derechos humanos, sin embargo se elevó el nivel de agresiones contra los defensores', sostuvo Blanco.

Específicamente en la Región Caribe, Cesar y Córdoba son los Departamentos con más casos de homicidios en 2017. Cada uno registra tres eventualidades, de acuerdo a las cifras que maneja la Defensoría del Pueblo. Y aunque no se precisa el número de amenazas, estas se han incrementado en el Cesar, según el Sistema de Alertas Tempranas del órgano de control.

Mientras que en Atlántico, se reporta un caso de homicidio el año pasado, cuando el líder de víctimas, Bernardo Cuero Bravo, fue asesinado durante un partido de fútbol que observaba en el barrio Villa Esperanza, de Malambo.

Precisamente la Defensoría del Pueblo, a través de su analista del Sistema de Alertas Tempranas, Ana Rosa Fuentes, cuestionó que las autoridades nacionales transformen los móviles de los asesinatos contra los defensores de los derechos humanos y los reduzcan a 'líos de faldas'.

'En muchas ocasiones se han referido a que estos homicidios no tienen nada que ver a su labor de defensa, pero posteriormente y, gracias a la labor de la sociedad civil, han salido a la luz pública que estas agresiones sí están directamente relacionadas con sus actividades por los derechos humanos', dijo Fuentes.

Tras finalizar el tercer ciclo del Examen Periódico Universal, tanto los delegados de la ONU, como la Defensoría del Pueblo y los académicos de la Universidad Rafael Núñez llamaron a no perder de vista las recomendaciones del Consejo de DDHH a Colombia.