Catorce policías quedaron este jueves en libertad luego de haber sido retenidos por campesinos cocaleros cuando pretendían erradicar narcocultivos en una convulsa zona de Nariño, informaron fuentes oficiales.
Los uniformados fueron liberados la tarde de este jueves luego de haber sido acordonados el miércoles por la comunidad de Santa Rosa, en la frontera con Ecuador, cuando llegaron a erradicar los sembradíos de hoja de coca, indicó el ministerio de Defensa en Twitter.
Los agentes habían sido además 'objeto de agresión por parte de campesinos que protestaban por la presencia policial en la zona', sostuvo más temprano la policía en un comunicado.
Los erradicadores habían sido 'conminados a trasladarse' por la población hasta un caserío aledaño luego de su retención.
En octubre de 2017, siete campesinos murieron en un enfrentamiento con la fuerza pública durante una protesta contra la erradicación de cultivos en Nariño, la zona con más sembradíos de hoja de coca del país.
Colombia es el principal cultivador mundial de hoja de coca, materia prima de la cocaína, y también el mayor productor de este tipo de droga, según la ONU.
El presidente Juan Manuel Santos ha dicho que en el último año se erradicaron 54.000 hectáreas de narcocultivos y la meta es llegar a 115.000 para finales de 2018.
Los esfuerzos de erradicación van acompañados de planes de sustitución de siembras ilegales por legales.
Santos firmó a finales de 2016 un acuerdo de paz con las Farc, hoy desarmadas y transformadas en partido político, en el que la otrora guerrilla comunista se compromete a ayudar a combatir el narcotráfico y a promover la sustitución y erradicación de los narcocultivos.
Las Farc, que fueron la guerrilla más poderosa de América, han reconocido haber utilizado recursos del narcotráfico para financiar su alzamiento armado.
Colombia vive un conflicto armado que, en medio siglo, ha dejado unos ocho millones de víctimas entre desaparecidos, muertos y desplazados.