La última vez que Aidee Reyes habló con su esposo fue el pasado miércoles en la madrugada, mientras el paso del huracán Irma destrozaba la isla San Martin y lo dejaba sin casa. La comunicación duró apenas un minuto. Su esposo alcanzó a contarle que una mesa era su único refugio.
Durante estos cuatro día, Reyes no ha conseguir tener información sobre su esposo, ni amigos o familiares. Ella reside en Barranquilla, ciudad desde donde decenas de familiares reclaman apoyo y ayuda del Gobierno Nacional para atender a los compatriotas afectados en San Martin. Se calcula que unos 4.000 colombianos residen allí.
'No tenemos información de nuestros familiares, no sabemos en qué estado se encuentran. Tenemos entendido por las noticias que no tienen luz, comunicación, ni alimento', manifestó Reyes.
De acuerdo con las autoridades neerlandeses, el potente huracán ha destruido hasta el 70% de los hogares y edificios en San Martin, donde se estima que viven unas 40.000 personas.
Yiselle Fuentes es una de las madres barranquilleras con familiares ‘desaparecidos’ en la isla caribeña. La mujer cuenta, angustiada, que desconoce el estado de salud de sus 20 familiares.
'Yo viajé a Barranquilla y dos días después de conoció la noticia que venía un huracán. Allá están mis hijos, esposo, madre, sobrinos, hermanos, tíos. Todos. No he podido saber nada de ellos', contó.
'Pedimos al Gobierno Nacional, a las autoridades, que tomen medidas. Sabemos que países como Venezuela, Cuba, Perú, Canadá, han enviado ayudas a sus parientes, pero no a gente de otros países, entonces ¿por qué Colombia no ha hecho nada?', expresó la mujer.