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Rosalía Ramírez, exveedora del Colegio Gimnasio Castillo Campestre de Bogotá, fue sentenciada a 27 meses de prisión domiciliaria y al pago de una multa de 90 millones de pesos por su responsabilidad en la muerte en extrañas circunstancias del joven estudiante Sergio Urrego.

El juzgado 39 de Conocimiento profirió el fallo, luego de avalar el preacuerdo firmado por Ramírez con la Fiscalía. En ese pacto previo, la veedora aceptó su responsabilidad por los delitos de discriminación agravada y ocultamiento de elementos materiales probatorios.

De acuerdo con las investigaciones, Ramírez fue quien le impuso un memorando y una suspensión a Urrego por considerar que, con su orientación sexual, el joven incurría en conductas contrarias a las normas del manual de convivencia del claustro académico.

Como consecuencia de lo anterior, al joven se le ordenó tratarse con el psicólogo y se le impidió ingresar a las clases hasta que el profesional lo aprobara.

La exfuncionaria reconoció que al inicio de la investigación fueron borrados los archivos que contenían los memorandos y la exigencia de que asistiera a terapia psicológica.

Ramírez fungirá como testigo dentro de la investigación que se adelanta contra la rectora del plantel educativo, Amanda Azucena Castillo, y la psicóloga Ivonne Cheque.

'Fallo histórico'

El abogado de la familia Urrego, Samuel Escobar, calificó el fallo como 'histórico'. 'Esta es la primera sentencia condenatoria por el delito de discriminación con base en la orientación sexual y envía un mensaje claro y contundente a los niños, niñas y adolescentes: No están solos, la administración de justicia no va a permitir la discriminación'.

Asimismo, afirmó:'Se ha logrado descubrir la verdad, es un paso más para lograr justicia para Sergio. Logramos descubrir más información sobre la discriminación que sufrió Sergio', precisó.

Por su parte, la madre de Sergio Urrego, Alba Lucía Reyes, celebró la decisión y dijo que 'espera la justicia, verdad y reparación del buen nombre de mi hijo'.