Voceros de las Farc divulgaron desde La Habana un comunicado mediante el cual afirman que el grupo insurgente no es el único responsable del conflicto armado, por lo que hicieron un llamado al Congreso de la República para que desde allí se discutan juiciosamente los orígenes de la confrontación y no se siga enviando a la sociedad el discurso simple de que la guerra es sólo el ataque de 'un malo muy malo, contra un bueno muy bueno'.
Destacando que a comienzos de semana se haya llevado a cabo en el Senado un debate en torno a la paz, alias Pablo Catatumbo, lector del comunicado, señaló que a pesar de las distintas posiciones políticas, y excepto el partido Centro Democrático, todos los sectores políticos respaldan los esfuerzos hechos en la mesa en procura de un acuerdo, poniendo el tema dentro de las prioridades de la agenda nacional.
A pesar de lo anterior, el grupo insurgente llamó la atención respecto a que una vez escuchadas las intervenciones en el capitolio de la mayoría de voceros, se notó un desconocimiento sobre la historia y la naturaleza del conflicto armado. Catatumbo cuestionó que varios de los intervinientes hayan coincidido en afirmar que sólo se firmará un acuerdo en La Habana si los jefes guerrilleros van a la cárcel.
El grupo rebelde mencionó particularmente al senador Álvaro Uribe Vélez diciendo que 'él y sus alfiles —que nunca han reconocido la existencia de un conflicto armado interno— harán hasta lo imposible para evitar que las futuras generaciones de colombianos disfruten de un país en paz'. Para las Farc, el proceso de paz no puede interpretarse simplemente como una rendición y un sometimiento a la justicia.
En el mismo sentido, plantearon una serie de interrogantes reclamando respuestas sobre los culpables de los falsos positivos, las más de 6.500 masacres cometidas por los grupos paramilitares y el despojo de tierras en varias regiones del país, entre otros temas. También se preguntan si son las Farc las únicas causantes de los seis millones de desplazados, de la violencia de las últimas seis décadas, de la participación de menores en el conflicto, de las torturas y las desapariciones forzadas.
En una alusión tácita al proceso de desmovilización de las Auc en el Gobierno anterior, plantearon el interrogante: '¿Entonces, debemos creer que los paramilitares ya pagaron sus culpas y que en Colombia no hay paramilitares y sólo son bandas criminales narcotraficantes, una de las cuales son las Farc?'
En la misma línea de inquisiciones, sugieren que en las responsabilidades de la guerra también tienen su cuota la clase dirigente, los partidos políticos, los empresarios, los terratenientes y las multinacionales. 'Debemos señalar que para hablar de justicia es necesario conocer toda la verdad. No se puede pactar un modelo de justicia en el que el Estado y los determinadores queden impunes', dice un aparte del comunicado leído en Cuba.
Las Farc dicen que ante la más cercana posibilidad que ha tenido el país para poner fin a la expresión armada del conflicto, le compete al Congreso de la República abordar temas profundos como los precios del petróleo y del oro, el descenso de las exportaciones y el cierre y la quiebra de los hospitales. Frente a estos asuntos, Catatumbo aseveró que el Gobierno le está incumpliendo a las organizaciones sociales.
Coinciden con el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle Lombana, respecto a que hoy es más cierto que antes vislumbrar escenarios de paz, pero controvierten algunas de las interpretaciones que el funcionario ha dado respecto a lo que sucede en la mesa, entre varios puntos en lo concerniente a la agilidad de las conversaciones y la dejación de armas. Esto último, no puede interpretarse como la entrega del armamento a la contraparte.
Reacciones en la Cámara
Para el nuevo presidente de la Cámara de Representantes, Alfredo Deluque Zuleta, es cierto que los orígenes del conflicto tuvieron distintos actores que se han venido diluyendo con el tiempo, como también es claro que la guerrilla no es la única fuente de la confrontación. Al contrario de lo que dicen las Farc, asegura que en el Congreso sí se ha legislado para para que el país entienda que se debe avanzar hacia una sociedad más incluyente.
Dijo el parlamentario a El Heraldo que la Ley de Víctimas es ejemplo de cómo desde el Congreso se ha reconocido, que incluso el Estado, tiene responsabilidad en el conflicto. Agrega Deluque que advierte en la corporación un consenso para que se alcance un acuerdo en La Habana. 'Todos quieren la paz, incluso el Centro Democrático, a pesar de algunas diferencias', señaló el líder político, quien afirmó también que la legislación para el posconflicto dependerá de los compromisos a los que se llegue en la mesa.
