Luego de conocer las renuncias de los magistrados de la Sala Civil, Jesús Vall de Rutén Ruiz y de la Sala Penal, María del Rosario González Muñoz, la Corte Suprema de Justicia emitió un comunicado a través de cual señala que comparte 'la profunda preocupación de todos los servidores de la Rama Judicial frente al generalizado clima de desconfianza que se observa en el país hacia la justicia'.
La crisis institucional actual de la justicia se inició con una denuncia contra el magistrado monteriano Jorge Pretelt por presuntamente pedir un soborno para favorecer una tutela.
Tras las renuncias de los dos magistrados, el máximo tribunal de la justicia ordinaria hizo 'un llamado urgente a la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes y a la Fiscalía para que ejerzan sus funciones con la celeridad, rigor y eficacia que demanda este caso, dado el impacto negativo que está ocasionando a la credibilidad del sistema judicial en su conjunto'.
