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La muerte de las mascotas puede dar nueva vida a través del compostaje.

La idea de que los restos de una mascota fallecida den vida a plantas es una tendencia que poco a poco ha ido ganando espacio alrededor del mundo.

El investigador agrícola Jorge Elizondo explica que en épocas pasadas la disposición o el desecho de los animales muertos estaba limitado a la incineración, al entierro e incluso, muchas veces, 'el cadáver se dejaba al aire libre para que los depredadores hicieran de las suyas, provocando la atracción de plagas y malos olores. Esto además daba pie para que se produjera contaminación de aguas superficiales y subterráneas, 'con el consiguiente peligro para la salud de los animales domésticos y silvestres'.

Elizondo explica que en la actualidad, gracias a los avances que existen, se cuenta con una alternativa como el compostaje. Técnica que él define como económica, efectiva y muy fácil de llevar a cabo. 

'Con este sistema, los cadáveres de los animales son degradados a un abono orgánico, sin producir malos olores y sin atraer moscas o depredadores. Esta alternativa presenta, además, el menor riesgo ambiental y de bioseguridad, comparados con los métodos convencionales', afirma.

Mascotas que dan vida

En Colombia existe una empresa que elabora abono orgánico a partir de mascotas muertas.

Esta iniciativa sirve como terapia para aquellos tenedores que quieren conservar el recuerdo de sus animales de compañía, pero de alguna manera contribuyendo con el medio ambiente a través de una nueva vida, en este caso una planta o un arbusto.

Daniel Correa, cofundador de Pleia, explica que la incineración de un cuerpo requiere de la quema de combustibles fósiles y por consiguiente se genera una emisión de carbono a la atmósfera y en el caso de una sepultura se corre el riesgo de la contaminación de corrientes de agua subterráneas.

Cabe recordar que en las empresas funerarias de mascotas el tema del compostaje es todavía nuevo, razón por la que en el país todavía no existe una variedad de empresas que se dediquen a ofrecer este servicio.

En Medellín, los clientes de este servicio tienen la posibilidad de que los restos de sus animales sean utilizados para cultivar árboles en un jardín conmemorativo o pueden optar por recibir una maceta fertilizada con los restos de su mascota fallecida.

Uno de los objetivos de este tipo de ritual es 'proporcionar a la mascota una despedida que refleje la importancia que tuvieron en la vida de sus cuidadores'.

Este procedimiento ya se ha realizado con humanos en Estados Unidos. En 2019 en la capital del país norteamericano se legalizó el compostaje humano. A partir de este año en ese Estado se podrá realizar el proceso de 'reducción orgánica natural'.