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Dos delfines (hembra y macho) fueron liberados en la costa de Santa Marta tras haber sido curados de las heridas causadas al enredarse en un chinchorro durante una faena de pescadores de la zona de Ciénaga y Tasajera.

La pareja de adultos pertenecen a la especie Tursiops Truncatus, conocidos como Mulares o Nariz de Botella, que habitan todo el año en los mares de este litoral.

Regresaron a su hábitat pocos días después que los veterinarios del Centro de Atención, Valoración y Rehabilitación de Fauna Marina (CAVR- Marino) de la Corporación Autónoma Regional del Magdalena, Corpamag, que opera en el Acuario de El Rodadero, los analizaran científicamente.

Julieth Prieto, bióloga del ente ambiental, precisó que fueron encontrados el pasado 20 de junio por pescadores, 'quienes en un acto consciente y responsable decidieron trasladarlos al CAVR- Marino, al quedar enmallados en sus chinchorros'.

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'Durante la faena, los pescadores narraron haber sentido un fuerte tirón que arrastraba el arte de pesca, por lo que decidieron empezar a recogerlo hallando a los dos delfines', comentó.

Añadió que 'como consecuencia de la maniobra, los animales se enredaron resultando heridos. Además mostraban signos de ahogamiento y debilidad producto de la lucha en la red', indicó.

Los animales fueron movilizados hasta el CAVR de Corpamag, siendo atendidos por el equipo técnico (biólogos marinos, médicos veterinarios y cuidadores), quienes realizaron el registro y la valoración física.

'Se les realizó limpieza y desinfección de las heridas en la piel, hidratación; se estabilizaron sus constantes fisiológicas, se evaluaron sus órganos internos por medio de ultrasonido y toma muestras sanguíneas y de exudados para posterior análisis de laboratorio, para finalmente precisar su diagnóstico y eventual tratamiento', explicó la médico veterinaria del Acuario de El Rodadero, Ángela Dávila.

Los delfines fueron dejados en cuarentena mientras eran observados por el personal del CAVR-Marino.

Durante los últimos 8 días los animales fueron atendidos, recibiendo hidratación y dieta apropiada y balanceada para su especie.

'Su recuperación fue rápida y exitosa pues las lesiones que presentaron al ingreso evolucionaron satisfactoriamente, y una vez cumplidos todos los protocolos de verificación de bienestar animal, se determinó la reintroducción de esta pareja de delfines al medio natural', indicó la profesional.

El rescate de estos animales por parte de pescadores y su rehabilitación por personal especializado fue posible gracias a la alianza entre Corpamag y el Acuario de El Rodadero, al igual que a las labores de educación ambiental adelantadas en los últimos 5 años con las comunidades costeras del departamento.

La bióloga Julieth Prieto dijo que son delfines más corpulentos de la zona de Santa Marta y habitan entre Bocas de Cenizas y el Parque Tayrona.