Millonarias pérdidas económicas registran un grupo de cultivadores de mango de Ciénaga, Magdalena, debido a que la fruta no es comprada por una empresa que solía hacerlo.
Miles de toneladas del producto se acumulan en las fincas con el latente peligro de causar enfermedades fitosanitarias en la región por la descomposición de la fruta.
Son montañas de mango las que se observan en el trayecto rural entre el corregimiento colorado y las zonas del volcán y Costa Verde.
Los fruticultores claman ayuda oficial. Son más de 200 los afectados.
Las pérdidas son incalculables pero lo más grave es el riesgo de la aparición de la mosca de la fruta.
