Un voraz incendio consumió en la madrugada de este lunes un almacén de remates en el mercado público de Pivijay, Magdalena. Un cortocircuito habría sido lo que originó el evento.
La emergencia se presentó en el establecimiento comercial de razón social Medellín, propiedad de Arturo Franco y se propagó por el material inflamable que allí reposaba, en su mayoría plástico.
La conflagración fue sofocada por los bomberos del vecino municipio de Salamina en razón a que en Pivijay no hay este servicio. El apoyo incondicional de la comunidad fue fundamental en la extinción del fuego. 'El olor a humo se sentía por todo el pueblo', dijo Carmen Cristina Vargas.
La comunidad ha expresado su inconformismo por la falta de un cuerpo de bomberos, situación que no se concibe toda vez que recientemente varios negocios comerciales fueron cerrados supuestamente por no pagar el impuesto bomberil.
