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Las emergencias a causa del caudaloso arroyo de la calle 85 serán, prontamente, parte del pasado. El alcalde Alejandro Char anunció la apertura de la licitación para el desarrollo de las obras de canalización en este sector del norte de la ciudad.

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El mandatario distrital destacó que esta es una obra que ha sido requerida por la comunidad y traerá beneficios al evitarse “tragedias” durante la época invernal en la capital el Atlántico. En este proyecto se contempla una inversión cercana a $120 mil millones.

“En Barranquilla hemos demostrado que sí se puede ir acabando con los arroyos más peligrosos. Contento de anunciarles que acabamos de publicar los pliegos de licitación de las obras de canalización y reconstrucción vial del arroyo de la 85 desde sus afluentes de la carrera 46 con calle 88 y la carrera 45 con calle 85. Muy pronto este arroyo dejará de ser una tragedia para nuestra gente”, sostuvo el alcalde Char.

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Desde la administración distrital se destacó que esta zona cuenta con una “intensa” actividad comercial debido a la presencia de centros educativos, clínicas, centros médicos, oficinas administrativas, viviendas y múltiples establecimientos comerciales “que ven su funcionamiento paralizado durante los eventos de lluvia”.

Indicó que la parte baja de la cuenca –que corresponde al sector conocido como Siape, en las inmediaciones de la descarga al Rio Magdalena– ya se encuentra canalizada. Así mismo, el Distrito indicó que un tramo adicional de cerca de 1.8 kilómetros –desde Siape hasta la carrera 52 con calle 84 y que es conocido como el arroyo de la 84– también fue canalizado y será el punto en el cual se realizará la entrega de las aguas canalizadas.

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El secretario de Obras Públicas, Rafael Lafont, explicó recientemente que en estas obras se utilizarán tubos de concreto de dos metros de diámetro, los cuales serán ubicados a seis y siete metros de profundidad.

“Los carros van pasando por arriba y nosotros vamos trabajando por abajo, tal como se canalizó el arroyo de las calles 90, 91 y 92 hace unos seis años, que era un arroyo caudaloso”, explicó el funcionario.

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Recalcó que con esta intervención, “la gente no va a sufrir con el tráfico y el ruido porque esto, al ser tan profundo, no se siente que está trabajado”.