Las risas se apoderaron del Gran Malecón. La niñez de Barranquilla gozó y disfrutó de una jornada cargada de recreación, deporte, salud y mucho contenido educativo.
El Distrito trasladó este sábado como parte de la celebración del mes del Niño toda una oferta institucional en la que los más pequeños conocieron, accedieron y quedaron ‘matriculados’ con la diversión.
Juegos tradicionales como el trompo, la cuerda y la peregrina tomaron su espacio en este escenario no solo para entretener a los niños y niñas que asistieron al evento, sino que además se convirtió en la ruta para conservar ese legado generacional.