El mar no le da tregua a la vía Barranquilla- Ciénaga. Desde hace un par de meses varios tramos de los kilómetros 17 y 18 de la Troncal del Caribe se han visto afectados con la erosión costera, lo que amenaza con derrumbar parte de la carretera interdepartamental, según usuarios de la vía.
No es la fuerte brisa lo que hace que el asfalto se encuentre húmedo. Se trata de las mismas olas del mar que llegan hasta el área que bordea la carretera, y cuando chocan contra la estructura sobrepasan el nivel de la vía.
En los tramos enrocados de los kilómetros 19 y 20 la situación ya es habitual, por lo que los usuarios de esta vía encendieron las alarmas, como una medida preventiva para evitar que en los kilómetros 17 y 18 ocurra la misma situación.
A través del servicio de mensajería de Wasapea a EL HERALDO, varios conductores mostraron su preocupación al ver que la situación podría 'extenderse' hasta por más de 5 kilómetros lineales, poniendo en riesgo no solo la ecología del lugar, sino la vida de los usuarios de la vía.
Uno de los lectores reportó que el pasado fin de semana más de 4 kilómetros de la vía, entre los puntos 17 y 21, permaneció mojada por el agua de mar. 'Eso hizo que los conductores redujeran la velocidad en esa zona, lo que originó un tráfico lento', dijo el denunciante.
Un equipo de este medio se trasladó hasta la zona y observó que el asfalto estaba húmedo. Además, que en el kilómetro 18+450 el mar, en algunos momentos, logro salpicar directamente la carretera.
Mientras que a lo largo del kilómetro 19 hasta el 20 el rocío del mar se esparce por toda la calle y alcanza a mojar los vehículos que transitan por ambas calzadas.