Compartir:

Cubierto por coposos y frondosos árboles frutales se esparce Cevillar desde hace 64 años en un sector de la localidad Suroccidente de Barranquilla, donde la tranquilidad y el silencio de las jornadas diurnas y vespertinas son interrumpida ocasionalmente por el ruido de las rutas de buses que circulan de sur a norte y viceversa cruzando el barrio, y por la inseguridad que perciben sus habitantes.

Está ubicado desde la carrera 20 hasta la carrera 14, entre las calles Murillo y Cordialidad. Y desde la Cordialidad hasta la calle 56, entre las carreras 14 y 18, limitando en esta área con los barrios San José, Villate, La Ceiba, La Sierra y La Victoria.

Allí residen más de 4.000 personas, de acuerdo con las declaraciones de los representantes de la Junta de Acción Comunal (JAC) del barrio en mención, quienes viven rodeados no solo por los inmuebles residenciales, sino que también encuentran entidades bancarias, supermercados, centros médicos, establecimiento con juegos de azar, bares, discotecas, centros bíblicos e instituciones educativas.

Sin embargo, un poco más de seis décadas atrás, los terrenos donde hoy queda Cevillar no se asemejan a lo que ahora 'es un barrio popular y folclórico de Barranquilla', como lo definen sus moradores.